Ganará o no ganará, que eso es algo que tampoco depende exclusivamente de él, pero Thomas Pieters (-7), una vez más, vuelve a estar en la pomada del Czech Masters. Tal y como ocurrió en cuatro de las seis veces que había venido ya a jugar este torneo, con el conocido e impresionante saldo de dos victorias, un segundo puesto y un noveno. Hoy ha entregado un 65 ‘estándar’, y eso que terminaba por el 18 enviando la bola al agua desde el tee y rematando la ronda con un bogey.
De todos modos, hechas las presentaciones, sería grosero no citar ya mismo al líder del torneo después de la primera jornada, que no es otro que Louis De Jager (-8). El sudafricano, que es muy capaz de mirar a los ojos a Pieters si hablamos de pegada, ha firmado un 64 sin un solo borrón en la tarjeta, así que se postula como candidato junto al belga y, asimismo, junto al estadounidense Johannes Veerman (-6), el defensor del título, que no parece muy dispuesto tampoco a dejarse impresionar por el historial del belga en tierras checas.
Otro que ha cerrado su vuelta sin un bogey ha sido Carlos Pigem (-4), el mejor español en el turno vespertino. No ha estado nada mal el arranque de la Armada española en el Albatross Golf, sobre todo si tenemos en cuenta el pobre historial del golf español en este campo hasta la fecha, aunque sólo Ángel Hidalgo (-5) haya finalizado el día dentro del top ten. Perro ahí están también los Anglés (-4), Cañizares (-3), García Heredia (-3), García Rodríguez (-2) o Borja Virto (-1), todos ellos con vueltas por debajo del par, unas más afiladas que otras.
No ha sido el mejor día, por el contrario, de Rafa Cabrera Bello (+2), que mañana va a tener que remar de lo lindo para pasar un corte que bien podría irse hasta -2, ni tampoco de Gonzalo Fernández Castaño (+1), Álvaro Quirós (+1), Javier Otaegui (+1) y Eduardo de la Riva (+5).
