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El francés logra en Abu Dhabi la mayor victoria de su carrera con un golpe de época

Ahora sí a Victor Perez se le ha puesto cara de Ryder Cup

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Victor Perez
Victor Perez posa con el trofeo de campeón del Abu Dhabi HSBC Golf Championship.

Victor Perez ha conseguido este domingo la victoria más importante de su carrera. Ha ganado el Abu Dhabi HSBC Championship, su primer Rolex Series y el primero también de todo el golf francés. Su tercer triunfo en el DP World Tour. Lo ha hecho con magia, con un golpe en el hoyo 17 que se recordará toda la vida, y con un desenlace agónico que le ha hecho resoplar más veces que en un Miura en el hoyo 18. Ahora sí, se le pone cara de Ryder Cup a este jugador que reside en St Andrews.

Ha sido una ronda final con tintes épicos en el Yas Links. Había una multitud de jugadores peleando por la victoria. Estacazo va, estacazo viene, han ido presentado su candidatura al título hasta once jugadores diferentes. Todos, más pronto o más tarde, han ido claudicando. Perdieron fuelle muy pronto Adrián Meronk, Grant Forrest y Guido Migliozzi. El italiano no terminó de encontrar la velocidad de aciertos que necesitaba. Cuando parecía que arrancaba su gran ataque, acabó derribado por dos dobles bogeys. Richard Bland, que enseñó su placa pronto con un birdie-eagle en el 1 y 2, tampoco tardó en retirarse con una batería de cuatro bogeys entre los hoyos 6 y 9.

Así las cosas, el torneo se convirtió en una bella batalla entre Perez, Soderberg, Min Woo Lee, Francesco Molinari, Harrington, Lowry y Sharma. Al instante definitivo sólo llegaron Perez, Lee y Soderberg. Lowry, que apestaba a gran favorito, cayó víctima de un cortocircuito brutal a partir del hoyo 14. Firmó un parcial de seis sobre par en cuatro hoyos, incluido un triple bogey en el 16 tras enviar dos bolas al agua. Mientras, Molinari se fue diluyendo a medida que los birdies no le iban cayendo y Harrington se esforzó, ofreció una titánica batalla, pero simplemente no le dio para llegar arriba del todo. Le faltaron birdies en los últimos cuatro hoyos, pero cualquiera del dice nada a este señor de 51 años…

Perez tomó el mando a falta de siete hoyos con dos birdies espléndidos en los hoyos 10 y 11, el primero embocando desde fuera de green y el segundo con un tercer tiro antológico en este par 5 después de fallar la salida. La dejó a un palmo del hoyo. Un bogey inesperado en el 14 con un tripateo le daba vidilla a muchos, Harrington, entre ellos, pero lo resolvía rápido con un birdie en el 15 desde cuatro metros. Soderberg y Lee, a la chita callando, aún no había dicho su última palabra.

Es justo en este punto cuando nos plantamos en la montaña rusa. El vértigo. Perez firma un birdie de época en el hoyo 17. Convierte un lío gordo en un momento para la historia. Falló su salida al búnker, un lugar bastante visitado por la posición de la bandera. No era un golpe fácil. La bandera estaba a 20 metros. Su tiro es celestial. La pega perfecta, pellizcada, agresiva, atrapando en el momento del impacto los granos de arena necesarios, por encima del trapo, bota pasada el agujero y regresa con un efecto de retroceso de seda hasta caer mansamente dentro del hoyo. Lo que olía a bogey se convirtió en birdie. El golf en 20 segundos. Todo puede ocurrir. Ahí tomó dos golpes de ventaja y pareció decidir el torneo. C’est fin comenzaba a aparecer como antesala de los títulos de crédito. Pero no…

Quedaba el hoyo 18, un par 5 revirado y traicionero, aunque hoy se estaba jugando más fácil porque habían adelantado el tee. Hoy sí se llegaba de dos y han caído muchos birdies. Debía ser un paseo triunfal para Perez y se transformó en un viaje de baches y angustia. Tiró su primer golpe al búnker, el segundo estuvo a punto de no pasar el agua de la izquierda y se quedó, con su dosis pertinente de suerte, en el rough, tampoco un rough muy espeso, no crean. Por el mismo precio podría haber terminado en el agua. El tercer golpe fue a calle, cuarto a green y dos putts. Bogey.

De pronto, entraban de nuevo en escena Soderberg y Min Woo Lee. El sueco, que jugaba con Perez, necesitaba un birdie en el 18 y el australiano, que ‘regaló’ un bogey en el 17, fallando un putt de metro y medio, debía hacer eagle. Soderberg, que también falló la salida en el 18, volatilizó sus opciones con un mal tercer tiro que terminó en las barbas del búnker. Difícil entender que no se dejara al menos una opción de birdie en el green. Par. Resopla Perez.

Aún habría emoción. Lee pegó una salida salvaje y buscó el green de dos. No lo cazó, pero se dejó una oportunidad con un approach de algo menos de 40 metros desde la derecha. Lo hizo muy bien y a punto estuvo de hacer el eagle en dos ocasiones, una vez con la bola de ida, que pasó cerca del hoyo, y otra de vuelta tras regresar por la inercia del peralte del green. Se quedó a un dedo. Alucinante. Más resoplidos de Perez…

El francés ya apuntó maneras de Ryder Cup la semana pasada en la Hero Cup, sumando 3,5 puntos de cuatro posibles, y esta semana lo ha confirmado en el Yas Links. La historia juega a su favor. Todos los ganadores en Abu Dhabi, desde que el torneo es Rolex Series, se han metido en el equipo de la Ryder ese año: Fleetwood (2018), Westwood (2020) y Hatton (2021). Hay que recordar que la edición de 2020 se aplazó a 2021 por la pandemia. Perez ya peleó por estar en la Ryder en Whistling Straits, pero al final no le llegó. Hoy ha demostrado que está preparado para pelearse con quien haga falta por una plaza… Y con Luke Donald de testigo directo.

Con este triunfo, Perez se coloca 57º en el ranking mundial, por lo que se abre las puertas de clasificarse para el Masters de Augusta (top 50 la semana previa) y pone un pie en el WGC Match Play, aunque todavía lo debe confirmar.

Resultados finales del Abu Dhabi HSBC Golf Championship 2023