Ya es oficial. El hoyo 18 se jugará como par 5 este domingo. La USGA ha decidido escuchar a los jugadores y ha desechado la fórmula de jugarlo como par 4. Realmente, la USGA asegura que nada tiene que ver su decisión con lo que se ha escuchado esta semana, sino con el parte del tiempo. Se prevé un viento del norte, que en este hoyo afecta de izquierda a derecha y que complica mucho cazar la calle siendo par 4. En cualquier caso, entre bambalinas se asegura que la opinión de los golfistas también ha pesado. Uno de los más vehementes fue Jordan Spieth, que considera que este hoyo está pensado para jugarse como par 5 y que al hacerlo par 4 no tiene ningún sentido. En cualquier caso, Spieth estaba preparado por si finalmente se hubiese jugado como par 4. Tenía un plan B.
«Si todo encaja más o menos como tengo en mi cabeza, la idea es pegar el drive a la calle del hoyo 1. Es cierto que me quedaría un tiro a green un poco más largo, pero la caída del drive es más ancha y, sobre todo, evito el bunker de calle. Esa es la idea, pero ojalá el torneo vaya tan buen para mí que pueda salir con un hierro 6″, señala. Bueno, pues ya no hará falta. El hoyo 18 se jugará como par 5.
– Spieth está convencido de que puede ganar este domingo, aunque también sabe que debe mejorar su nivel de golf. El campeón del Masters hace un buen matiz: «mentalmente estoy fuerte y creo que la experiencia del Masters me ayudará, pero necesito jugar mejor que hasta ahora, sobre todo con el drive y evitar los tripateos, para poder ganar». Sobre cuál mejor prefiere entre el Masters y el US Open, Spieth saca el capote: «pregúntame cuando tenga conmigo el trofeo de US Open y te hablaré con más conocimiento».
– Branden Grace se enfrenta por primera vez a la experiencia de salir un domingo de major en el partido estelar. Eso sí, el sudafricano tiene algo muy bueno a su favor: ha salido como líder de un torneo el domingo en seis ocasiones y ha ganado las seis veces. Sí, señor, es un killer.
– Dustin Johnson también tiene motivos para pensar que el US Open será suyo. Está jugando al golf muy bien, con un drive espectacular y se está dejando muy buenas oportunidades de birdie. Además, ya tiene experiencia en estas lides, aunque haya sido traumáticas. Será cuarta vez que salga en el partido estelar el domingo en un major. «Sé lo que tengo que hacer y cómo lo tengo que hacer», asegura. Sus números en los grandes, pese a no haber ganado aún, son impresionantes.Ha hecho top ten en uno de cada tres que ha jugado.
– Tampoco están mal las estadísticas de Jason Day. Ha jugado 18 majors y ha hecho top ten en siete ocasiones. Su victoria, qué decir, sería la gran historia de este US Open. Da vértigo de sólo pensarlo.
– Mención aparte y especial merece Louis Oosthuizen. El sudafricano saldrá a tres golpes de los líderes tras protagonizar una de las remontadas históricas en el US Open. Su secuencia de 66 y 66 nunca se dio en este torneo viernes y sábado. Si gana, se convertiría en el primer jugador que lo hace empezando con 77 golpes en los últimos 80 años. Además, sería la mayor recuperación de la historia desde un jueves. Nadie recortó doce golpes tras la primera ronda para ganar el US Open.
– Otro que no se nos puede escapar: Cameron Smith. El australiano está jugando su primer US Open y saldrá hoy a tres golpes de los líderes. Espectacular. Hace tiempo que viene demostrando este joven jugador forjado en el Asian Tour de lo que es capaz. Si gana será el primero en hacerlo a la primera desde Francis Ouimet en 1913.
– Rory McIlroy acabó ayer desesperado por una insana costumbre que le acompaña en los últimos tiempos. «Llevo muchas rondas seguidas que apuntan a 64 ó 65 y se acaban convirtiendo en 70 ó 71. Tengo que cambiar esta dinámica». La victoria parece imposible, pero si juega como ayer y tiene más acierto en los greenes, será uno de los grandes animadores del domingo.
