Sólo falta una Marisol a la americana porque la vida es una tómbola, un carnaval, entretenimiento y hay que disfrutar de todo, de un grupo musical por aquí o de selfies de los jugadores por allí en mitad de la vuelta. Seremos o no felices, pero lo importante es aparentarlo. Y no digo que no se lo estén pasando en grande en Tulsa, sexto torneo de LIV Golf este año, y que no haya gente en el campo, porque la hay, pero tanto autobombo promocional y divertimento da para reflexionar si todo va como la seda en la gira saudí o es pura apariencia. En mes y medio saldremos de dudas in situ en Valderrama.
Hechas las (im)pertinentes observaciones, al lío. Y en el meollo del asunto asoma su busto por encima del resto Dustin Johnson (-14), ese hombre tan imperturbable como talentoso; él, DJ, sí que animó el cotarro de lo lindo a días de que arranque el PGA Championship, segundo Major del año. El jugador de Carolina del Sur ha dado un manotazo en la mesa y quiere su primera victoria del año, segunda en el circuito saudí tras ganar en Boston en 2022 (fue segundo dos veces y tercero una más durante la temporada). Sus cinco birdies de sopetón para cerrar el jueves tuvieron continuidad el sábado en Tulsa. Hizo tres en las cuatro primeras banderas para cazar al sudafricano Branden Grace (-12) en el liderato; otros dos en el 9 y el 10, y una serie final de tres más en el 15, 16 y 17, aunque se fue a cenar con mal sabor por la corbata en el putt del 18 que le costó el único bogey. Aun así, no hubo quien le tosiera al ex número uno mundial, que se encamina a la quinta victoria estadounidense en seis torneos…
DJ is dialed in early ☎️#LIVGolf @4acesgc_ pic.twitter.com/tMhwJpQTgW
— LIV Golf (@livgolf_league) May 13, 2023
A priori, sólo puede evitarlo Grace, otro a quien también le nacen algunas canas en la barba, que mantuvo el ritmo a lo Induráin de Johnson hasta que se quedó sin aliento en el 15 y en el 16, cuando cometió sus únicos errores de las dos rondas, aunque en el 17 neutralizó uno de los errores. Está a tres impactos del líder, pero este Dustin, en modo killer, recuerda al vencedor de dos Majors, 24 eventos del PGA Tour y nueve del DP World Tour. Da miedo. Ambos, estadounidense y sudafricano, fueron quienes más dinero se repartieron en LIV el pasado curso merced a sus buenos resultados: más de 35.600.000 dólares para Johnson y más de 16.600.000 para Grace. Así quién no defiende a LIV a capa y espada…
Bubba Watson (-10), que se anotó un gran 64 con birdie final y tras recuperarse de un bogey inicial, Cameron Smith (-8), Bryson DeChambeau (-8) y Brandon Steele (-8) pueden dar la campanada siempre y cuando Johnson, y en menor medida Grace, aflojen el paso en la ronda dominical. Brooks Koepka (-7) y Richard Bland (-7) aparecen demasiado lejos.
Eugenio López Chacarra (-6) igualó su segunda mejor ronda del año, cinco menos, después de un gran inicio con dos birdies, empañados con un solitario bogey antes de amarrar otros cuatro aciertos para encaramarse en la novena plaza, el mejor de la terna de la Armada. David Puig (-3) ocupa el 27º lugar después de dos bajo par con un eagle, dos birdies y dos bogeys. Sergio García (-2) es 33º al empatar con el campo con aciertos y errores a pares. Habrá emoción en el colofón por equipos. Los 4 Aces (-26) de Johnson manejan la situación seguidos muy de cerca por los Stinger (-25) de Louis Oosthuizen.
