Collin Morikawa (-24) ha dejado visto para sentencia el Sentry Tournament of Champions del PGA Tour. El golfista de Los Ángeles ha seguido este sábado con su actuación impecable en el Plantation Course at Kapalua. Ha entregado una tarjeta de 65 golpes en la tercera jornada y saldrá el domingo con seis de ventaja sobre Scottie Scheffler, J.J. Spaun y Matthew Fitpatrick y siete sobre Jon Rahm y Tom Kim.
Sí, estamos de acuerdo, en ningún deporte conviene vender la piel del oso antes de cazarlo y, seguramente, mucho menos en el golf, pero ahora mismo se antoja muy complicado pensar en un domingo con una foto distinta a la de Morikawa con el trofeo del Sentry. Los argumentos atropellan: es líder desde la primera jornada, ha hecho birdie en 14 de los 18 hoyos del Plantation, no ha cometido un solo bogey en 54 hoyos y lidera la semana en birdies, golpes ganados, recuperaciones desde la arena, recuperaciones en general y putts por greenes en regulación. Lleva cinco victorias en su carrera en el PGA Tour y en Hawái tiene cocinada el 95 por ciento de la sexta.
El torneo está en sus manos y no parece dispuesto a realizar concesiones. Lo más cerca que ha estado de cometer un bogey desde el jueves ha sido un putt de tres metros que embocó el viernes en el hoyo 4 y otros dos de dos metros, hoy en el hoyo 10 y el jueves en el hoyo 12. El resto, dadas. Impoluto. Lleva -24 sin sufrir ni una mijita.
Morikawa está jugando con el tiralíneas en la isla de Maui. No falla un golpe y, además, el putter está brillando a una altura poco habitual en su carrera. El dato es definitivo. En golpes ganados con el putt ocupa la segunda posición en el Sentry, pues bien, en su carrera sólo ha quedado cuatro veces en el top 10 en esta parcela en un torneo. Sus resultados en esas cuatro ocasiones fueron: campeón del PGA Championship 2020, segundo en el Genesis Invitational 2022, segundo en el Memorial 2021 y campeón del WGC Concession 2021. El año pasado en Mayakoba, hace menos de dos meses, se puso a trabajar con el gurú del putt Stephen Sweeney y los resultados no están tardando en llegar.
El Sentry está en manos de Morikawa. Parece prácticamente una quimera que el jugador de 25 años, campeón ya de dos Grandes (PGA y Open), no sea capaz este domingo de hacer, como mínimo 70 golpes. Esto llevaría su liderato a -27, con lo que obligaría a los segundos a hacer 64 golpes para, al menos, forzar el desempate. Rahm, por su parte, tendría que firmar un 63, la mejor vuelta de la semana realizada hoy por Max Homa. Manda Morikawa.
La historia, obviamente, también está de su lado. En los últimos 15 años hemos tenido a 25 líderes saliendo con seis o más golpes de ventaja a la última ronda de un torneo. Ganaron 23. Además, es el noveno en toda la historia que llega a -24 a falta de 18 hoyos. Los otros ocho ganaron el torneo. Blanco y en botella.
