Jon Rahm abrió su rotación de campos en el American Express del PGA Tour jugando en La Quinta, donde entregó una de las mejores tarjetas del día para situarse muy arriba en la clasificación. El de Barrika firmó una ronda de 64 golpes, ocho por debajo del par, con la que, como de costumbre, presenta su candidatura para pelear por el triunfo. Nada más finalizar, valoró su actuación en esta jornada inicial de competición en California.
«Soy exigente con muchas cosas, pero es un gran comienzo de torneo. Realmente, no puedes ganarlo en este campo, pero seguro que puedes perder el ritmo. Es un gran comienzo, una ronda sólida de golf y una buena carta de presentación. Ojalá pueda seguir así toda la semana y sentirme un poco mejor en los greenes», comenzó diciendo el español ante los medios oficiales de la gira.
«Estoy feliz de haber jugado este campo en estas condiciones sencillas. Este recorrido puede mostrar los dientes porque algunas calles son bastante estrechas. Fallarlas no penaliza demasiado, pero no puedes atacar banderas. Si la pones en la calle tienes un hierro corto y cuando hay ráfagas de viento, se te pueden escapar. Es un campo donde puedes hacer cinco bajo con bastante frecuencia, si juegas bien en los otros campos de la rotación pero no haces un resultado bajo aquí puedes verte fuera del grupo de cabeza. Hay que completar la rotación, si sopla el viento mañana en el Nicklaus también puede complicarse, todo se iguala», añadió.
«Jugué una ronda sólida de golf, ojalá pueda seguir así toda la semana y sentirme un poco mejor en los greenes»
A Jon le preguntaron también cuál fue su mejor golpe del día: «Es difícil saberlo. Tal vez el segundo en el 11. Creo que esa madera 3 a dos metros y medio me ayudó mucho a cambiar el ritmo tras el putt fallado en el 9 y un bogey bastante tonto en el 10. Era necesario ese golpe para encarrilar las cosas».
Después de ganar en Hawái en el torneo de campeones con el que arrancó el año, Rahm se muestra muy seguro de su juego: «Muy confiado, creo que allí se demostró. No jugué mi mejor golf ni cogí calles con frecuencia, pero pude hacer birdies. Me gustaría que la gente pensara que es difícil vencerme o casi imposible porque, de nuevo, si no tengo mi mejor juego y estoy logrando rondas como la de hoy, debería ser un año bastante bueno».
Hace cinco años, cuando el torneo se denominaba CareerBuilder Challenge, el de Barrika logró la que significaba su segunda victoria en el PGA Tour. Algo que en teoría debería darle confianza. Aunque él apunta a otro dato: «Podría decir que lo que me da más confianza es que nunca terminé fuera del top 14 en este torneo. He sido consistente siempre y me he dado oportunidades. Así que espero poder seguir haciendo lo que estoy haciendo y tener opciones el domingo».
