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Explicamos por qué es imposible que Rahm o García ganen este THE PLAYERS

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Henrik Stenson remontó cinco golpes para ganar el THE PLAYERS en 2009. © Golffile | Fran Caffrey
Henrik Stenson remontó cinco golpes para ganar el THE PLAYERS en 2009. © Golffile | Fran Caffrey

Todo preparado para la cuarta y última ronda del THE PLAYERS, aunque parezca mentira después de la accidentadísima marcha del torneo, con profusión de retrasos y suspensiones desde el mismo jueves. Al fin se avista el puerto tras la tempestad, porque no podía ser de otra manera, helase, granizase, jarrease o soplasen tornados y huracanes. Este torneo es sagrado para el PGA Tour, su buque insignia, su pasarela de abundancia y glamur (ahí está la bestial bolsa de premios de 20 millones de dólares y los 3,6 para el ganador), el único que tiene ‘permiso’, según el reglamento interno del propio circuito, para finalizar un martes si hiciera falta.

La insurrección de los secundarios se mantiene viva y llega hasta los mismos horarios de salida de esta definitiva ronda, con Anirban Lahiri (-9) en lo más alto de la tabla tras completar esta mañana de lunes su tercera vuelta y firmar un espléndido 67. Además en los partidos estelares de la cuarta ronda tenemos también a Sebastián Muñoz (-8), Dough Ghim (-8), Tom Hoge (-7), o Russell Knox (-6), todos ellos fantásticos jugadores, por supuesto, pero en ningún caso candidatos en las quinielas previas. Junto a ello aparecen otros nombres de mayor peso, los Paul Casey (-8), Cameron Smith (-7), Sam Burns (-8), Louis Oosthuizen (-6), Shane Lowry (-6) o Kevin Kisner (-6). De este amplio grupo de insurrectos e ilustres debería salir el ganador. Veamos por qué.

En las 39 ediciones del THE PLAYERS que ya se han jugado en el Stadium course del TPC Sawgrass (1982-2021), el ganador final salió del líder después de la tercera ronda en quince ocasiones. No son demasiadas, pero tampoco están mal las probabilidades que la historia de este campo concede en este caso a Lahiri.

Lo verdaderamente importante es que en este recorrido no se han dado grandísimas remontadas dominicales o de última ronda. De hecho, nunca se ha dado un ganador que viniera desde más allá del undécimo puesto una vez finalizada la tercera vuelta, que es el puesto que ocupaba Rickie Fowler antes de salir a jugar la última ronda en 2015 y de llevarse el torneo en un desempate. Se puede ver desde otro punto de vista: salvo en aquella ocasión, el ganador final siempre salió en este campo del top ten antes de iniciarse la roda definitiva. En concreto: Hal Sutton ganaba en 1983, la primera de sus dos victorias, saliendo a jugar la última vuelta en séptima posición y a cuatro golpes del líder, y esta fue la marca o el listón que superó Fowler en 2015, viniendo desde el undécimo puesto.

Además, la mayor diferencia que el ganador ha remontado para cantar victoria en la última jornada es de cinco golpes. Y sólo se ha dado dos veces: Stenson ganaba en 2009 remontándole cinco golpes al anterior líder, Alex Cejka; y Justin Leonard hacía lo propio en 1998 para desbancar a Lee Janzen. Pero hay que matizar algo: Stenson salía en segunda posición a jugar la última vuelta y Leonard lo hacía en tercera posición.

Este dato histórico y este aspecto del ‘comportamiento’ del campo descartan absolutamente a los dos españoles, Jon Rahm y Sergio García, que parten a seis golpes de la cabeza y en el puesto 27º. Dicho de otro modo: para ganar deberían hacer lo nunca visto. Está claro que los récords están ahí para ser batidos, pero aún más diáfano se nos aparece la complejidad del reto.

Resultados en directo del THE PLAYERS Championship