Gonzalo Fernández Castaño (-3) tenía motivos más que sobrados para marcharse al hotel con una sonrisa de oreja a oreja tras la primera ronda del Sony Open. La sonrisa de la satisfacción. Del trabajo recompensado. El jugador madrileño sacó adelante una gran vuelta de 67 golpes con el pico y la pala. Se ha situado en el puesto 38º, a ocho golpes del sideral líder Justin Thomas y a tres del top ten.
No fue una vuelta fácil. Cierto es que el Waialae CC de Honolulu no es el campo más agradecido del mundo para planear una ronda de golf tranquila. Es muy estrecho y sus calles son muy difíciles de coger. De hecho, es el segundo campo más difícil del PGA Tour en este aspecto desde 2003. A Gonzalo le tocó ayer pagar este peaje. Apenas cazó cinco calles y doce greenes. Así, le tocó ir a remolque todo el día.
Sin embargo, lejos de perder el ritmo, Gonzalo se puso el mono de trabajo y comenzó a exhibir su juego corto. Estuvo brillante alrededor de green, con excelentes recuperaciones como en los hoyos 12 (para salvar un buen bogey) o en el 13 (para rescatar un magnífico par). Ahí estuvo la clave de la vuelta. Se encontraba al par en ese momento y otro bogey habría supuesto un revés importante en un día donde se vieron más birdies que otra cosa.
Después de salvar el par en el 13, Gonzalo firmó tres birdies en los últimos cinco hoyos. Se sacó de la manga un excelente 67 con un gran juego corto y pateando muy bien. También supo sacar partido a los dos pares 5 finales del recorrido (9 y 18). En ambos pateó para eagle desde distancias más que razonables y consiguió birdies sencillos.
En definitiva, un buen estreno en su primera presencia en Honolulu, aunque aún le queda trabajo por hacer. El corte está situado provisionalmente en -2 y lo normal es que hoy se vaya a -3 ó -4. Necesita seguir apretando. Si consigue afinar algo más el juego largo, aún puede volar muy bajo en este campo de Waialae. Consulta aquí los resultados del torneo en directo.
