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"Esto no es el fin, es sólo el comienzo"

Dura carta abierta de Greg Norman al PGA Tour

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Greg Norman
Greg Norman

El director general de LIV Golf Investments, Greg Norman, ha respondido con contundencia al comisionado del PGA Tour, Jay Monahan, y le ha advertido: «Esto es sólo el principio». Lo ha hecho mediante una dura carta distribuida este jueves.

La misiva llega dos días después de que Monahan reiterara su postura de que cualquier jugador que firmara con la Super Liga sería expulsado del PGA Tour. Así lo dijo en una reunión mantenida con los jugadores el martes en el Honda Classic y de la que informamos puntualmente en Ten Golf.

Norman ha insistido en que tal prohibición no se sostendría legalmente y ha subido el tono. «Seguramente bromeas», ha escrito el australiano en la carta. «Y seguramente, los abogados del PGA Tour deben estar conteniendo la respiración. Durante décadas he luchado por el derecho de los jugadores a disfrutar de una carrera en la que sean recompensados plena y adecuadamente por sus esfuerzos. Son deportistas únicos entre un millón. Sin embargo, durante décadas, el Tour ha puesto sus propias ambiciones financieras por delante de los jugadores, y todos los jugadores del Tour lo saben. El Tour es el Tour de los jugadores, no de su administración. ¿Por qué llaman a la gran joya de la corona, más allá de los Majors, «El Campeonato de los Jugadores» y no «El Campeonato de la Administración»?».

Norman no se ha mordido la lengua en su comunicado. «Cuando tratas de farolear e intimidar a los jugadores amedrentándolos, eres culpable de ir demasiado lejos, de ser injusto y probablemente estés violando la ley».

Las negociaciones de los jugadores con la Super Liga se han ido filtrando durante los dos últimos años, aunque se intensificaron en las últimas semanas. Alcanzó su punto álgido hasta la semana del Genesis Invitational donde todo parece haber quedado en punto muerto.

La semana comenzó con la afirmación de Kramer Hickock de que 17 jugadores ya habían firmado para unirse a la liga. Pero después se fueron desmarcando jugadores, empezando por Rory McIlroy y siguiendo con Collin Morikawa, Justin Thomas, Bryson DeChambeau o Dustin Johnson y la Super Liga se desmoronó como una castillo de naipes.

Además, el pasado jueves se publicó un extracto de la próxima biografía de Phil Mickelson, escrita por Alan Shipnuck, en la que el seis veces campeón de Grandes calificaba al PGA Tour de «dictadura» y afirmaba que había reclutado a jugadores y abogados para redactar los documentos con la Super Liga, con el fin de dar a los jugadores una ventaja y provocar un cambio en las políticas del PGA Tour. Ahora parece estar en una vía muerta.

«Sencillamente, no pueden prohibir a los jugadores que jueguen al golf», dice la carta. «Los jugadores tenemos el derecho y la libertad de jugar donde queramos. Sé que muchos jugadores del PGA Tour siguen estando interesados en jugar en la nueva liga, además de seguir jugando en el PGA Tour. ¿Qué hay de malo en ello? ¿Qué hay de malo en permitir a los jugadores tomar sus propias decisiones sobre dónde jugar y con qué frecuencia hacerlo? ¿Qué tiene de malo que los jugadores puedan elegir? ¿Por qué se sienten tan amenazados como para recurrir a una amenaza tan desesperada, imprudente e inaplicable?», prosigue.

Norman ha tratado de desafiar al PGA Tour durante décadas. A mediados de los años noventa lideró la creación de un denominado World Golf Tour que ofrecía enormes remuneraciones a los mejores jugadores del mundo. La idea fue rechazada por el entonces comisario del PGA Tour, Tim Finchem, y Norman también fue excluido del proceso de planificación de los WGC, que se consideran en gran medida una respuesta a la causa de Norman.

Aunque la Super Liga no se ha puesto en marcha oficialmente, LIV Golf Investments ya ha prometido 300 millones de dólares para reforzar el Asian Tour, que acogió el Saudi International a principios de febrero. El PGA Tour concedió a los jugadores una exención única para jugar este torneo, pero lo hizo con ciertas condiciones que requieren jugar en los futuros AT&T Pebble Beach Pro-Ams, el evento del PGA Tour que se jugó la misma semana que el Saudi International. Veremos si se cumple esta exigencia. En su nota anunciando los permisos, el PGA Tour enfatizó que la decisión no sentaba precedente.

«La competencia en todos los aspectos de la vida, el deporte y los negocios es saludable y los jugadores merecen ser bien compensados, por lo que muchos jugadores han expresado su interés en jugar en una nueva liga», escribió Norman. «Pero cuando usted amenaza con acabar con las carreras de los jugadores y cuando incurre en prácticas laborales injustas con su red de restricciones a los jugadores, demuestra exactamente por qué los jugadores están abiertos a unirse a una liga que trate bien a los jugadores, los respete y los compense de acuerdo con su verdadero valor.

«Comisionado, esto es sólo el principio. Ciertamente no es el final».