El Zurich Classic of New Orleans es un torneo que da pie a historias curiosas. La sola formación de las parejas invita en ocasiones a escribir un libro. Hay veces, muchas, en las que la asociación se produce por una simple y llana cuestión de amistad. Aquí hay poco misterio. Pero en otras los ‘matrimonios’ siguen criterios bastante más científicos y elaborados. Poca broma.
Sam Burns y Billy Horschel, que juegan juntos esta semana en el TPC Louisiana, pertenecen a este segundo grupo. Su unión surgió en el laboratorio y así lo ha desvelado el propio Horschel.
Todo empezó de una manera casual. «No tenía caddie para el Masters de Augusta de 2020 y me surgió la oportunidad de contar con Travis Perkins, que ya entonces estaba trabajando con Sam Burns. Nos quedamos juntos esa semana y en una de las conversaciones salió el tema del Zurich Classic. Me dijo que Sam estaba buscando también una pareja para el torneo, así que se abría una puerta…», ha explicado Horschel.
No crean que Horschel dijo sí sin más. No crean que eligió a Burns porque no había otro en el horizonte. Para nada. Se lo tomó muy en serio. Lo primero que hizo fue contactar con el colaborador que le lleva las estadísticas y pedirle un informe. «Quería saber si desde su punto de vista su juego y el mío se podían compenetrar bien», ha apuntado. La respuesta fue rotunda. «Sería un compañero muy bueno, encajáis, una jugada de tres más tiro libre adicional, me dijo», ha comentado Horschel.
Aquello fue una pista más para terminar de decantarse, pero aún quedaba una opinión más por escuchar. Horschel y Burns compartían psicólogo y Billy le hizo la misma pregunta que al estadístico. Brett McCabe, el psicólogo en cuestión, no lo dudó. «Le encantó el emparejamiento y no hubo que hablar más». Trato hecho.
Ahora mismo, Sam Burns ocupa un ranking mundial mejor que el de Horschel, por lo que es él quien debe elegir a su pareja. En 2021 Horschel estaba mejor. «Me alegro que ahora no haya decidido despedirme y buscarse a otro», ha señalado Horschel.
En este sentido, conviene valorar la lealtad de Burns. Por si no lo sabían, el bueno de Sam es íntimo amigo de Scottie Scheffler, Número 1 del mundo. Ni que decir tiene que Scheffler no tenía pareja para esta semana y ha terminado con el experto en top 5 del ranking mundial Ryan Palmer. Podrían a ver ido juntos, pero Burns ha decidido seguir el instinto de Horschel y las opiniones valiosas de un estadístico y un psicólogo.
Eso de que se compenetran, desde luego, ya se pudo comprobar el año pasado. El año pasado acabaron en la cuarta posición. Por cierto, Horschel ha ganado dos veces este torneo y Burns es natural de Louisiana. Más cosas en común para terminar de decantar la balanza… si es que hacía falta.
