Jon Rahm (-9) y Sergio García (-8) saldrán este domingo con opciones de ganar el THE PLAYERS Championship. Así, puesto negro sobre blanco, significa que el primer gran objetivo de la semana está cumplido. Bien por ellos. Vuelta este sábado de 67 golpes para el jugador de Barrika y de 71 para el de Borriol. Ambos están a cuatro y cinco golpes respectivamente del líder, el irreductible Lee Westwood (-13), y a dos y tres de la segunda plaza que ostenta Mazinger DeChambeau (-11).
Un clic genial y el particular método de Rahm para ganar distancia
Rahm es quinto y Sergio es octavo, ergo las opciones son reales. Esto es un hecho objetivo. Pueden ganar este domingo el THE PLAYERS. Muchos otros, la gran mayoría de hecho, no pueden decir lo mismo. No se trata de generar ilusión de manera barata. Es una realidad. Eso sí, con matices. Volvamos al terreno de la objetividad. Las opciones son pocas. Son muchos golpes de diferencia y los de arriba no son precisamente unos recién llegados.
Todos los birdies en una gran jornada de golf de Jon Rahm
Jon y Sergio han tenido maneras bastante diferentes de darse esta lejana opción. La del vasco, por ejemplo, deja un sabor de boca bastante más dulce. Rahm ha entregado una magnífica tarjeta de 67 golpes, con seis birdies y un solitario bogey. Sólo se han visto dos vueltas mejores (Justin Thomas, 64 y Cameron Smith, 65). Ha vuelto a jugar un gran golf, especialmente con los hierros. De nuevo ha cazado muchos greenes y otra vez ha metido algún que otro purito que siempre alegra el alma.
Lee, Bryson y Justin: una terna dura como el cemento y afilada como una katana
Sus primeros nueve hoyos han sido un prodigio de calidad. Es la hoja de ruta que deberá seguir mañana para tener opciones y apretar a los de arriba. Marchaba cinco bajo par en la primera vuelta desplegando un juego de muchos kilates. Cierto es que se ha dejado por el camino tres buenas opciones en los hoyos 16, 17 y 18, pero tampoco se le puede achacar demasiado. Viene de menos a más en la semana y ha conseguido llegar a tiempo para presentar su candidatura al triunfo.
Dustin Johnson renuncia a jugar los Juegos Olímpicos de Tokio
La vuelta de Sergio García, por contra, ha dejado un sabor más amargo. Ha sido como pasar de la montaña rusa al gusano loco. Está bien, pero te deja frío. Hay que darle mucho valor a su remontada. Le ha puesto bemoles y mucha raza. Arrancó con dos bogeys y empezó a ver a los líderes con prismáticos. Se le fue torciendo el día y lo consiguió enderezar con muy buenos putts y un juego mucho más sólido que al principio. Salió con los papeles cambiados y poco a poco los fue ordenando.
A golpe de martillo y cincel, como una hormiguita, fue poco a poco recuperando terreno. Ganó metro a metro y así, con cuatro birdies espléndidos en los hoyos 6, 9, 12 y 15, fabulosa secuencia, dijo hola a todos. ¿Os acordáis? Sí, soy el del jueves, que he vuelto. Este regreso, por cierto, lo vimos todos menos los patanes realizadores de la televisión americana, que sometieron a Sergio, líder el jueves, ganador aquí en 2008, mejor jugador de todos los tiempos en el THE PLAYERS, ganador del Masters y, sobre todo, candidato serio al triunfo, a un ninguneo indigno. En fin… Una más.
Spieth estuvo a punto de pegar un bolazo a… Sabbatini
Como íbamos diciendo, la remontada de Sergio era una realidad y mereció acabar mucho mejor de lo que lo hizo. Pegó un salidón en el 16 y no lo pudo aprovechar para sacar el birdie. Ejecutó el mejor golpe del día en el 17 junto al de Adam Scott y falló un putt de birdie de menos de un metro y acabó tripateando en el 18 con una excelente salida en calle. Lo mismo que acabó con -8 pudo hacerlo con -11 sin despeinarse. No es la primera vez que esta balanza de un golpe aquí o allá se comporta de manera tan cruel con Sergio.
Lo mejor es que él lo tiene asimilado y el domingo saldrá como si nada hubiera pasado, dispuesto a entregar esa vuelta tan baja que necesita para ganar. Él ya la ha hecho. La ha hecho esta misma semana.
Si queremos jugar a adivinos y poner una referencia, todo apunta a que la vuelta de hoy de Justin Thomas, 64 golpes, podría ser un buen objetivo para los dos españoles para darse una oportunidad de victoria. Toca disfrutar.
