Es complicado medir el grado de felicidad o satisfacción de todos los jugadores después de un torneo. Cada cual vive su propia película. Cualquiera diría a bote pronto que nadie en Detroit ha terminado el domingo más feliz que Tony Finau, el ganador, pero seguramente nos estaríamos equivocando. Sí, ganar es la bomba, la satisfacción es extraordinaria, el pecho se hincha, el orgullo sale por las orejas, pero asegurarse el puesto de trabajo en el PGA Tour un año entero cuando no lo tenías nada claro debe estar ahí ahí. Juzguen ustedes mismos.
Los tres más felices de Detroit a esta hora deben ser Joohyung Kim, Stephan Jaeger y Callum Tarren. Los tres han asegurado con su actuación en el Rocket Mortgage Classic su tarjeta para 2022. Jaeger y Tarren la renuevan cuando estaban en el filo de la navaja y Kim la obtiene por primera vez a través de la lista de no miembros. El séptimo puesto del coreano le permitirá, de sobra, sumar más que el 125 de la FedEx Cup cuando termine la semana que viene el Wyndham Classic y con ello concluya la temporada regular. Lo de Kim no es ninguna broma, lo ha conseguido disputando apenas cinco torneos regulares del PGA Tour en la 21-22. Eso sí, no podrá jugar los playoffs de la FedEx. La única manera sería ganando el Wyndham la próxima semana.
Jaeger ha dado un salto de gigante en la FedEx con su quinta plaza. Se ha metido entre los 100 primeros, mientras que Tarren, con su tarjeta hoy de 66 ha subido lo suficiente en la clasificación para asegurar también su puesto de trabajo en el primer circuito del mundo. Los tres se lo han ganado.
También pueden respirar con cierto alivio Matt Wallace y Rickie Fowler, aunque a los dos les queda trabajo por delante la semana que viene en el Wyndham. Fowler, al menos, ha visto que a pesar de no pasar el corte esta semana, se mantiene entre los 125 mejores. Mientras, Wallace, que ha terminado con cuatro birdies en cinco hoyos, ha subido hasta el puesto 126º. Se ha metido en la burbuja.
Uno de los grandes perjudicados de esta semana es otro europeo. Se trata de Danny Willett. Ha tenido una ronda final muy mala en el Rocket Mortgage (75 golpes) y ha perdido un puesto en la FedEx. Ha bajado del 126 al 127. Está en el auténtico alambre.
Todo se terminará de decidir la próxima semana en el Wyndham. Allí también estará el español Rafa Cabrera Bello, que necesitará una semana redonda para salir de Greensboro con la misma felicidad que hoy lo han hecho de Detroit Kim, Jaeger y Tarren.
