Sergio García (PAR) ha sacado adelante una vuelta de mérito en su estreno en el ZoZo Championship de Japón. El golfista de Borriol ha sido un león herido que ha sabido revolverse a cada mandoble que recibía del Accordia Golf Narashino Country Club. Y no han sido pocos. Las condiciones de juego en tierras niponas han sido bastante complicadas. Ha soplado el viento, ése que anuncia la tormenta prevista para este viernes y que ha obligado a adelantar los horarios de salida.
Tiger Woods muta en Godzilla en 14 hoyos de antología
Desde el tee no es un recorrido sencillo, por lo que si le unimos el viento se convierte en casi una tortura. Incluso para un jugador tan fino con el juego largo como Sergio García ha sido un día muy complicado. Apenas ha cazado seis calles, una tónica habitual en todos los jugadores, y once greenes. Ha sido una jornada de pico, pala y mono de trabajo remangado hasta los codos. Sergio ha estado muchas veces bajo la cuenta de diez segundos, tendido en la lona, pero siempre se ha levantado y en ocasiones con una tremenda brillantez.
Su comienzo fue similar al de Tiger Woods. Cometió bogey en el 4 y doble bogey en el 5 y muy rápido se colocó +3. Ahí llegó su primera gran reacción. Firmó birdies en el 6, 9 y 10 y se puso en tablas con el campo. Acto seguido cayeron de nuevo dos bogeys consecutivos (11 y 12), devolvió el guantazo con otro birdie en el 14, recibió con un bogey en el 15 y finalizó pegando fuerte y duro con un excepcional eagle en el 18. Vivo y coleando. Sale en pie del cuadrilátero.
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Hace mucho tiempo que García pelea cada vuelta, cada hoyo y cada golpe. Esa lucha acumulada, esa magnífica actitud es la que le permite que salgan vueltas como las de hoy, retorcidas, pero con final feliz. O al menos, sin demasiados daños. Sergio brilló especialmente con el juego corto. Está entre los cinco mejores pateadores en la media por green en regulación. De ahí, su alto nivel de acierto con cuatro birdies y un eagle.
Cualquier año de estos a Sergio se le ‘achinan’ los ojos…
El golfista de Borriol se mantiene en el torneo con un resultado de par que lo sitúa en el puesto 25º. Está a seis golpes de Tiger Woods y Gary Woodland, quizá algo lejos, pero metido de lleno en la pelea con 54 hoyos por delante. Si mantiene el nivel mostrado hoy en los greenes, raro será que no lo veamos arriba al final de la semana.
A Rafa Cabrera Bello (+3) le tocó sufrir más de lo que está acostumbrado. Hizo cinco bogeys y dos birdies. Su problema no estuvo precisamente desde el tee, ya que cazó nueve calles, un potosí en un día como hoy, sino con los hierros. No anduvo fino en los tiros a bandera y se dejó algunas situaciones complicadas para recuperar. Tampoco el putter acudió al rescate cuando Rafa lo reclamó. Una vuelta a contraestilo para el canario. De hecho, no cometía cinco errores en una sola ronda desde la primera del WGC FedEx St Jude Invitational. Han pasado desde entonces 23 vueltas.
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La noticia más positiva es que aún tiene 54 hoyos por delante sin corte para construir la operación remontada.
