– Collin Morikawa (-15), líder destacado del WGC Workday Championship, está siendo el mejor jugador del torneo en los tiros a bandera. Bien desde el tee, sí, pero fabuloso en los golpes de aproximación. Ahí está fabricando su brillante actuación y por ello es hoy el máximo candidato a la victoria. Es el segundo que más greenes en regulación ha cogido (43 de 54), sólo por detrás de Horschel (44), y además es el segundo que más cerca de bandera de media está dejando sus tiros (poco más de nueve metros).
Morikawa se había desbocado, pero al final viviremos emociones fuertes…
Cualquiera podría llegar a la conclusión de que la clave de Morikawa esta semana es que está muy inspirado en una parcela del juego en la que por otro lado ya ha demostrado más de una vez que es uno de los mejores del mundo. Ay, esos hierros… Sin embargo, hay un arma secreta clave íntimamente relacionada con esta brillantez en los segundos golpes. Se trata del juego corto…
Tee Times: Sergio, una hora antes del líder junto a Finau
Todo nace de unos consejos que le dio esta semana Paul Azinger, miembro de The Concession y uno de los golfistas más laureados de la historia. «Me enseñó una manera de aprochar muy simple y muy efectiva. Consiste en usar mejor la panza del palo. Lo pillé a la primera y me está ayudando muchísimo. No sólo me ha salvado muchísima veces esta semana, sino que además me da la confianza suficiente para ser más agresivo en los golpes a bandera», explica. Por eso, entre otras cosas, las está dejando más cerca que nadie.
Sergio exhibe repertorio y se reengancha al WGC Workday
Esta historieta es una nueva demostración de lo importante que es el juego corto. No sólo evita bogeys, dobles bogeys y demás tragedias, sino que te permite jugar con más libertas y confianza en los tiros a green. Todos corriendo al chipping green.
– Será un día de homenajes a Tiger Woods. Bonita iniciativa que ya han anunciado algunos jugadores. Vamos a ver a varios de ellos vestidos con el uniforme de ‘guerra’ clásico de Tiger los domingos, ya saben, pantalón negro y polo rojo. Han dicho que van a jugar así hoy Rory McIlroy y Justin Thomas, además de Patrick Reed, que lo utiliza desde siempre en su carrera también como homenaje a Woods, su ídolo. Llama la atención sobre todo que lo haga Rory, ya que el pasado miércoles antes del torneo no se mostró partidario de hacer homenajes a Tiger como si se hubiera muerto. En cualquier caso, habrá que ver qué otros jugadores lo llevan a cabo y será muy interesante ver ese partido con Reed y McIlroy, que juegan juntos.
Corti: una conexión al instante
Además, se ha sabido que esta semana DeChambeau, Kuchar y Jason Day, que juegan habitualmente la bola Bridgestone, misma marca que Woods, han serigrafiado el nombre de Tiger esta semana en las suyas. Bonito gesto.
– Es curioso casi todos los perseguidores de Morikawa aseguran que no atraviesan su mejor momento.
Brooks Koepka lo pasó fatal ayer con el cuello. «Llevo un mes y medio con dolores pero este sábado ha sido el peor día de todos. No podía mirar ni a la izquierda ni a la derecha y me ha afectado mucho en los golpes. Ni siquiera pienso en si tendré opciones de ganar el domingo, lo único que pido es jugar sin dolor. No se lo deseo a nadie. Es muy molesto. Lo he probado todo y no se termina de ir, hasta he cambiado la postura al dormir, pero no hay manera…».
Una curiosa confesión de DeChambeau sobre su revolución
Webb Simpson asegura que está cómodo con el swing. «Estoy ahí porque estoy pateando bien, pero no tengo confianza con mi juego largo. Un buen ejemplo fue el hoyo 17. Tenía un hierro 6 para tirar a green, pero decidí jugar corto. Fu inteligente porque hice birdie, pero es una muestra de que las cosas no están bien. La suerte es que estoy pateando muy bien esta semana».
Rory McIlroy está bien signos de progreso en su juego, pero aún le falta. «No estoy como me gustaría. Aún me queda para sentirme en el campo como yo quiero. Estoy pegando buenos golpes, pero no tengo la seguridad que necesito. No tengo muchas expectativas sobre lo que puedo ocurrir el domingo. Trataré de hacerlo lo mejor posible, pero ya veremos qué pasa».
A priori no son más que buenas noticias para Morikawa, aunque en realidad hay pocas cosas más peligrosas que un golfista sin expectativas. Es un arma de doble filo.
– Hablando de McIlroy, el norirlandés dio ayer una lección de honestidad. La bandera del hoyo 13, par 5, causó muchos problemas, hasta el punto de que con hierros 6 y 7 en las manos, Patrick Reed aseguró: «es imposible que nadie la deje a menos de seis metros de la bandera». Pues bien, Rory la dejó a cuatro metros y consiguió el eagle. «¿En serio?», respondió Reed al escucharlo. «Me parece increíble con esa bandera», insistió. No le faltaba razón al defensor del título. En realidad, McIlroy falló el golpe… «Sí, he hecho eagle, pero no quería tirar ahí ni loco. Estaba apuntando a la torre de televisión y me salió un pull muy profesional… Si busco dejarla ahí habría sido imposible». Grande, Rory.
– En cuanto a la dificultad del campo, sobre todo alrededor de green, Reed no tiene ninguna duda: «es el campo que más quebraderos de cabeza me ha dado en el juego corto. Hay que pensar muy bien el golpe que quieres pegar. Es estresante. Sólo recuerdo un campo donde lo haya pasado igual de mal: Pinehurst en el US Amateur. Era brutal alrededor de green». Ojo porque lo está diciendo el mejor jugador del mundo alrededor de green. Palabras mayores.
– La última vez que Billy Horschel salió en un partido estelar ganó el torneo. Fue en el Byron Nelson de 2017, su última victoria. Por cierto, reveló que no se ve jugando al golf con 45 años, mucho menos en el Champions…
– Hideki Matsuyama sigue acumulando hoyos sin hacer tres putts. Ojo a la secuencia. Ya suma 221…
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