Jon Rahm cumple en el PGA Championship su torneo número 100 desde que se hizo profesional. Número redondo y perfecto. No hay mejor ocasión para soplar unas velas tan significativas que un Grande. Lejos queda ya esa semana de junio de 2016, cuando el golfista vizcaíno se estrenaba como profesional en el Quicken Loans National, cita por cierto donde acababa en tercera posición, peleando por la victoria el domingo, y conseguía su billete directo para jugar el Open Championship en Royal Troon.
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Han pasado cuatro años de aquello, mucho tiempo o poco, según se mire. Han caído muchas hojas del calendario, pero lo que ha logrado Jon en tan poco tiempo es tan sublime que se ha pasado volando. «No me da ningún vértigo lo que ha pasado y lo que está por venir, aunque a veces admito que me cuesta creer que todo haya ido tan rápido. Cuando miro atrás a lo que ha sucedido y lo que he conseguido, no puedo más que sentirme orgulloso», asegura.
La rueda de prensa completa de Jon Rahm en español antes del PGA Championship (VÍDEO)
Jon prefiere no ponerse una nota concreta a este primer gran periodo de su carrera, aunque sí tiene muy claro que sería muy alta. «El otro día leí un reportaje de lo que habían hecho otros jugadores en sus primeros 100 torneos como profesional y la verdad es que lo mío es para estar contento. Soy deportista y soy exigente. Siempre pienso que se puede hacer más, pero la nota tiene que ser muy alta», asegura.
Lo que de verdad preocupa a Jon más allá del Número Uno
Obviamente, no hay mejor manera de soplar las cien velas que ganar el PGA Championship. Ese es el objetivo de Jon esta semana, aunque también lo sería fuera el número de torneo que fuera. Además, es plenamente consciente de que puede lograr dos cosas únicas, y no hay nada que le motive más a Rahm que lograr cosas que no ha hecho nadie antes y que quedan marcadas para siempre en la historia.
En este sentido, un triunfo esta semana sería único ya que se convertiría en el primer español que gana un PGA Championship en toda la historia. Aquí superaría incluso al gran Severiano Ballesteros, que lo jugó en trece ocasiones y su mejor resultado fue un quinto puesto en 1984. También sería único por el hecho de ser el primer Grande que se celebra en la era COVID-19. «Seguro que sería algo recordado para toda la vida, aunque no sea por algo bueno, pero siempre quedará ahí con todos los que ganen Grandes en 2020», aseguraba Rahm.
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En cuanto a las condiciones del torneo, Jon no tienen ningún problema en que sea una semana húmeda por la lluvia y algo más fresquita de lo habitual en esta época del año. «Es un tiempo similar al que hay en el European Tour y a mí no me ha ido nada mal allí, así que no tengo ningún problema. Será parecido a lo que vivimos cada año en Torrey Pines con el Farmers Insurance Open… y tampoco me ha ido mal, así que no tengo problema con estas condiciones. Ahora se trata de jugar bien», apunta.
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