Rory McIlroy (-6) ha arrancado el Open con una ronda de 66 golpes que de momento lo sitúa a sólo dos golpes del líder y en una segunda posición que perfectamente podría mantener al final del día, ya que las condiciones de juego se han complicado ligeramente por la tarde en el Old Course de St. Andrews.
Y el caso es que esta cantinela nos suena de algo. Y nos suena, además, muy reciente, porque el norirlandés no ha dejado de ser protagonista en todas las semanas de ‘majors’ en 2022. Sigue sin ganar un Grande desde 2014, pero en lo que respecta a la presente temporada, es imposible ponerle un ‘pero’, una objeción, o no calificar con sobresaliente su actuación y peso
Hace dos meses, en el PGA de Southern Hills, Rory firmaba un 65 en la primera ronda y se situaba líder del torneo. Al final, terminaría en una más que notable octava posición, a sólo tres golpes de los dos hombres que salieron a jugar el desempate, Justin Thomas y Will Zalatoris. Un mes después, en el US Open de Brookline, también arrancaba de la mejor manera, en esta ocasión con un registro de 66 golpes que lo situaba de entrada en la segunda posición, a un solo golpe del liderato… McIlroy terminaría en quinta posición en el The Country Club, a cuatro golpes del ganador, Matt Fitzpatrick.
En el Masters arrancaba de un modo más templado, es cierto, pero finalizaba con un refulgente 64 dominical que lo llevaba de cabeza a la segunda posición final, a tres golpes del inabordable campeón, Scottie Scheffler… El caso es que Rory no ha dejado de estar en el candelero este año en los Grandes y, como se ve, vuelve a estarlo. Scheffler es un excelente y merecido Número Uno mundial, pero hay un tipo, nacido en Holywood, Irlanda del Norte, hace 33 años, que lleva semanas, meses, ejerciendo también como tal.
Ya pueden todos los presuntos favoritos ponerse las pilas, porque son muchos los ilustres que han aprovechado las horas de bonanza matutina. Las banderas en el Old Course están muy escondidas, es verdad, porque en ese sentido el R&A ha querido echar una mano a su joya, a su vetusta Catedral, a su legendario recorrido, y hay jugadores de enorme peso que lo han acusado. Por ejemplo, el defensor del título, Collin Morikawa (PAR). Pero también son ya una pequeña legión los que se juntan ahí arriba, dispuestos a dar réplicas y contra réplicas a quien sea. Dispuestos, entre otras cosas, a seguirle negando a Rory los laureles en los Grandes: Cameron Smith (-5), Viktor Hovland (-4), Xander Schauffele (-3), Lee Westwood (-4), Ian Poulter (-3), Bryson DeChambeau (-3)… Por no hablar, por supuesto, del líder eléctrico, Cameron Young (-8), que no deja de crecer y crecer en su temporada de novato en la primera línea del golf mundial.
