
Calum Scott conquistó este domingo la Silver Medal, el reconocimiento que distingue al mejor golfista amateur en el Open Championship, uno de los mejores premios que puede recibir un aficionado en toda su carrera. Mucho más, como es el caso, si has nacido en Escocia.
Scott finalizó con un total de +8, en el puesto 43º, por delante de Tommy Morrison (+11), Jacob Skov Olesen (+11) y el español Luis Masaveu (+18), los cuatro que lograron pasar el corte de los doce que se clasificaron para jugar esta semana en Royal Troon.
Scott es un fenomenal pegador escocés de 20 años. Se marcha de Troon como el segundo jugador del Open en distancia desde el tee, sólo por detrás de DeChambeau. Es natural de Nairn, una pequeña localidad de las Highlands de Escocia, a orillas del mar del Norte. Toda la población de Nairn cabe en las gradas instaladas en Troon y aún quedarían más de tres mil sitios libres. «Este campo es un auténtico desafío, los segundos nueve hoyos son de los más difíciles que he jugado, pero el links de Nairn no anda muy lejos en dificultad jugando desde los tees de atrás. Se puede decir que estaba curado de espanto por lo que he jugado en mi casa toda la vida», confesaba el joven golfista tras acabar su ronda.
La Medalla de Plata del Open es su mayor éxito como amateur. Es el Número 13 del ranking mundial, pero destaca sobre todo por su consistencia. No ha ganado ningún torneo en su carrera, más allá de alguna prueba menor junior en Escocia, pero acumula una pila de top 10. Hasta este Open ha sido una especie de eterno segundo. Acabó subcampeón en dos ocasiones en el St Andrews Links Trophy, ha sido 3º y 5º en el Campeonato de Europa Amateur, ha finalizado tres veces segundo en Estados Unidos, donde juega con la Universidad de Texas Tech… En definitiva, es obvio que ganar, por ahora, se le ha hecho bola, aunque lo de ayer en Troon compensa todo lo demás.
Lloró como un crío, como lo que es, durante los último 100 metros del hoyo 18, cuando ya sabía que había ganado la Silver Medal. «Ha sido muy emocionante. Tanto mi caddie como mi entrenador en la universidad me dijeron ayer que si se daba el caso tenía que disfrutar el momento y dejarme llevar por las emociones. Es algo que recordaré toda mi vida. Ha sido precioso. De hecho, me he tenido que controlar un poco porque aún tenía que hacer dos putts para terminar. Desde luego, me lo he puesto difícil», aseguraba con gracia tras acabar con 40 golpes en los segundos nueve y estrechar su holgado margen respecto a los demás.
Como decimos, Scott estudia en la Universidad de Texas Tech, donde coincidió dos años con Ludvig Aberg. El sueco es su faro a seguir. «En la Universidad sabíamos que era muy bueno, pero no tanto. Ahora en serio, hablo mucho con él y le pido consejo. Es una gran persona. Ojalá pueda seguir sus pasos. Es un extraordinario referente», explica.
En este sentido, Calum, primer escocés que gana la Medalla de Plata en el Open desde Sam Locke en 2018, asegura que su gran objetivo a partir de ahora, en su último año de universidad, es ganar el PGA Tour University y obtener la tarjeta del PGA Tour, tal y como hizo en su día el propio Aberg.