Rafa Cabrera Bello (-2) ha firmado una puesta en escena sobresaliente en el US Open. El golfista canario ha entregado una tarjeta de 68 golpes y se ha colocado en el top ten del torneo, a sólo tres golpes del liderato que ocupa en solitario Justin Thomas. La ronda de Rafa no es una más en un Grande, ni mucho menos. De hecho, de momento, se cuela por méritos propios en la galería de las grandes gestas del golf español. No en vano, es el resultado más bajo realizado por uno de nuestros golfistas en el West Course de Winged Foot, ya sea en el US Open o en el PGA Championship. Ahí está la pica de Rafa.
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Sus 68 golpes superan la tarjeta de 69 que firmó Seve Ballesteros en el US Open que se celebró en este mismo recorrido de Nueva York allá por 1984. Hasta hoy era la única ronda bajo par de un español en este escenario. Curiosamente, Seve también lo hizo en su primera presencia en Winged Foot. Del mismo modo, Rafa ha superado por un golpe a Jon Rahm, que también ha hecho hoy 69 golpes, como Seve, en su estreno en este mítico trazado. Estos datos son una nueva muestra de lo suave que se ha mostrado la USGA en la preparación del campo este jueves. En toda la historia de Winged Foot sólo un español bajó de 70 golpes y sólo hoy lo han conseguido dos.
De momento, la única masacre la provoca Justin Thomas
Más allá del resultado, que al final es lo que queda, lo realmente importante es que Rafa hoy se ha ido a la cama con una sonrisa prudente. El golfista de Maspalomas se ha reencontrado con su swing y su juego largo. Ha cazado diez calles en un campo tan exigente desde el tee como Winged Foot. Nadie ha cogido más en esta primera jornada. Las sensaciones han sido mucho mejores de lo que venía teniendo días atrás. En definitiva, ha dado un paso adelante, aunque ya sabemos que en golf no hay nada peor que lanzar las campanas al vuelo, ya que siempre anda el tío del mazo esperando tras la esquina. Digamos que ha sido un paso adelante sobre el que seguir construyendo en los próximos días. Un soplo de aire fresco, tranquilidad y confianza. Algo que venía necesitando Cabrera Bello desde hace ya unas semanas. Hoy se ha quitado una mochila de encima, pero ya saben cómo es este deporte, mañana habrá que quitársela de nuevo.
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Rafa ha hecho cuatro birdies, un eagle y cuatro bogeys. El mejor momento de la vuelta ha sido, sin duda, el eagle. Sucedió en el hoyo 9. Tres golpes de alta escuela. Para enmarcar. Pegó un drive a la parte derecha de la calle de casi 300 metros, en segundo tiro grandioso de 213 y un certero putt de dos metros. Sensacional. No se puede jugar mucho mejor ese hoyo. Sólo se han visto dos eagles ahí este jueves, el de Rafa y el del canadiense Taylor Pendrith.
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Muy bueno también el estreno de Adrián Otaegui (+1) en el US Open. Vuelta de 71 golpes, con cuatro birdies y cinco bogeys. La parcela del juego que mejor le ha funcionado hoy han sido los hierros. Todos sus birdies han llegado con tirazos y el putt más lejano que ha metido ha sido de tres metros en el 6. En los hoyos 1 y 9 prácticamente se dejaba hecho el birdie. Buenas sensaciones y buen impulso para la ronda de mañana.
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A Eduard Rousaud (+6) le ha tocado sufrir más, aunque nadie podrá quitarle nunca ese inicio glorioso de US Open, embocando desde la calle en el hoyo 1 para eagle. En los primeros nueve ha conseguido mantenerse a pesar de hacer tres doble bogeys, pero en los segundos nueve le ha costado encontrar el acierto necesario. Ha cometido cuatro bogeys y se ha llenado en exceso la maleta. Aún así, todavía tiene margen para pasar un corte que debería estar en +4 este viernes. Debe jugar muy bien, pero puede hacerlo. Tendrá que mejorar su juego largo, ya que hoy sólo cogía cinco calles y siete greenes.
