Hace un año Anna Nordqvist (-12) cayó más allá del top 100 mundial. Fue exactamente, qué curioso, tras el AIG Women’s Open de 2020, que por cierto sí se jugó, no como el Open masculino. Hoy la golfista sueca ha ganado el British en Carnoustie y declara oficialmente acabada la travesía por el desierto en la que se había metido desde su último triunfo, precisamente en otro Grande, en el Evian Championship de 2017. Desde aquel glorioso día al sur de Francia, Nordqvist sólo había quedado segunda en una ocasión y tercera en otra.
Anna Nordqvist gana el AIG Women’s Open con un golpe de ventaja sobre Georgia Hall, Lizette Salas y Madelene Sagstrom
Que la sequía se haya roto con un Grande no es ninguna casualidad. Nordqvist es al golf femenino lo que Brooks Koepka al masculino. Ganan poco, pero ganan a lo grande. La jugadora sueca acumula siete victorias en su carrera y tres de ellas han sido en ‘majors’. Es obvio que se trata de una golfista tocada por una varita en las citas más importantes, consigue un nivel de concentración que no alcanza en otros torneos. Koepka, por cierto, ha ganado nueve torneos entre el European Tour y el PGA Tour y cuatro han sido Grandes.
Nordqvist ha logrado el triunfo en una jornada final de Open espectacular. Carnoustie se ha mostrado fiero, largo y ha puesto sobre la mesa eso que hace como casi ningún otro campo del mundo. Esos cuatro hoyos finales reparten tragedias a diestro y siniestro, arruinan sueños y construyen enormes victorias.
Nordqvist suma siete victorias en su carrera y tres Grandes
Hasta cinco jugadoras llegaron al hoyo 18 con opciones reales de victoria. Con -12, resultado ganador de Nordqvist, llegaron al último agujero Madelene Sagstrom y Nanna Madsen. La sueca venía por delante del partido estelar, compuesto por Madsen y Nordqvist (festival nórdico, por cierto) y cometió bogey. Una pena porque apenas diez minutos antes logró el birdie más espectacular de la última hora de juego. Lo consiguió en el 17, pegando un tirazo de 200 metros y dejando la bola a metro y medio del hoyo. Sensacional. Más trágico fue el final de Madsen. Su segundo golpe en el hoyo 18 acabó en el búnker de la derecha de green, con la malísima suerte de que se le quedó en el contra talud y tuvo que pegar cuesta abajo, con un ‘stance’ muy delicado. Podía salir cualquier cosa y le salió un filazo que casi acaba fuera de límites. Resolvió el hoyo con un doble bogey. Con un par salía a desempate con Nordqvist, con un birdie ganaba y con el doble bogey terminó quinta empatada. Muy cruel.
Con este final ha sido inevitable recordar lo que le sucedió en el hoyo 18 de Aloha durante el Open de España de 2019. Salió también como líder del torneo y mandó la bola al agua de salida en un mal golpe y una mala decisión estratégica. Aquí ha tenido peor suerte que en el sensacional recorrido de la Costa del Sol.
Otro final trágico de torneo para Nanna Madsen
Las otras dos jugadoras que llegaron con opciones de victoria fueron Georgia Hall y Lizette Salas. La inglesa tendría que haber metido un approach desee fuera para haber alcanzado el -12, pero la norteamericana, tras conectar un maderón de fábula desde la calle, se dejó una muy buena opción de birdie de unos cinco metros. No entró su putt y acaba segunda en un Grande por segunda vez este año. No ocurría algo así desde 2005.
Nordqvist ha jugado muy bien y ha tirado de experiencia para llevarse la victoria. Ha sabido templar los nervios y ni siquiera dos corbatas crueles en los hoyos 1 y 11 le han sacado de su guión. Sólo ha hecho un bogey y ha conseguido terminar el fatídico tramo final del 15 al 18 con cuatro pares. Es más, ni siquiera ha sufrido para hacer el par en el 18, lo cual es casi una gesta.
Antes de que sucediera todo esto, Minjee Lee (-10) había lanzado el mejor ataque de todos viniendo por detrás, con una gran tarjeta de 66 golpes. De nuevo un bogey en el hoyo 18, su único error del día, la dejó fuera de la ecuación. La australiana buscaba su segundo Grande consecutivo.
La última ronda también nos ha dejado las decepción de Nelly Korda, Brooke Henderson, Sei Young Kim o Lexi Thompson, que no fueron capaces de jugar bajo par para darse una oportunidad. Ha sido el triunfo de Nordqvist y también un baño importante de autoestima para Europa antes de la Solheim. No en vano, han terminado cinco europeas entre las ocho primeras. Carlota Ciganda (-1) se despidió con una vuelta de 71 golpes, puesto 34º. La navarra se ha dado un homenaje en el tramo final, con cuatro birdies consecutivos entre los hoyos 12 y 15.
Es el tercer Grande de Nordqvist y el tercero distinto. Ganó el KPMG Women’s PGA en 2009, el Evian en 2017 y ahora el AIG Women’s Open. Le quedan el US Open y el ANA Inspiration para completar la quíntuple corona. Del mismo modo, termina con una racha de nueve ganadoras primerizas consecutivas en ‘majors’, la secuencia más larga de la historia.
