Miguel Ángel Jiménez habló de su vuelta en la India y valoró la elección de Darren Clarke como capitán de la Ryder. La sensación de jugador malagueño es agridulce. Por un lado, está contrariado porque quería liderar al equipo en Hazeltine, pero por el otro apoya a Clarke a muerte y presenta ya su candidatura de la Ryder de 2018 en París.
«He jugado muy bien, muy consistente. Bajo par siempre es bueno y más bajo par, mucho mejor. He hecho dos bogeys (10 y 16), el último en el hoyo 16 pegando un buen golpe de salida: la corté un poquito demasiado y tocó en el tronco de un árbol que hay en mitad de la calle y hay que driblar un poco, y la bola se me desbocó 60 metros a los arbustos. Una pena porque no me merecía ese bogey. He hecho solamente tres birdies (13, 14 y 15); una pena, porque he tenido muchísimas ocasiones para birdie pero el putt no ha estado hoy a la altura de las circunstancias», señaló.
Sobre la capitanía de la Ryder Cup: «Estoy, quizás, un poco descontento. Llevo 27 años en el Tour, he jugado varias Ryder Cup, también he sido vicecapitán y creo que ya merecía estar en esa situación.
«Por otro lado, estoy muy contento por Darren. Ayer le di la enhorabuena porque también se lo merece; no quiero desmerecerle ni mucho menos, él ha hecho mucho por el Tour y ha estado involucrado en varias Ryder Cup como jugador y como vicecapitan. Pero, en fin, soy un poquito más mayor.
«Ayer le mandé a Darren un mensaje dando la enhorabuena, no le llamé porque pensé que estaría desbordado y ya tendremos tiempo de hablar de ello. Le dije que estoy seguro va a ser un gran capitán y aquí me tiene para cubrirle las espaldas en lo que haga falta y ayudarle en lo que necesite. Cuenta con todo mi apoyo.
«En el futuro… quién sabe, a lo mejor el año que viene todavía juego la Ryder Cup, jugando como estoy dándole a la pelota igual me meto en el equipo. Por supuesto, mi nombre estará para la capitanía de la siguiente Ryder Cup».
