Louis Bayard Jr., de Princeton, entró en los libros de historia al coronarse en 1897 como el primer ganador universitario de la NCAA, entonces denominada NIGA (National Intercollegiate Golf Association). Yale, dominadora hasta principios de los 40 con 21 títulos, se llevó la victoria por equipos en la edición inaugural.
En total, 126 años contemplan al torneo de los torneos para los jugadores aficionados que compiten en Estados Unidos, los Nacionales de la NCAA, donde sólo media docena de chavales han birlado el triunfo a los estadounidenses en la clasificación individual. Uno de ellos es nuestro Alejandro Cañizares (2003 con Arizona State); los otros cinco fueron el australiano James McLean (1998), que rompió con una hegemonía yanqui de un siglo; el inglés Luke Donald (1999), los canadienses James Lepp (2005) y Matt Hill (2009), y el belga Thomas Pieters (2012).
Un trío de la Armada se presenta desde este viernes en el Grayhawk de Scottsdale (par 70), con un calor sofocante, con el sueño de alcanzar el título individual, que se dirime tras cuatro rondas el próximo lunes, y el colectivo, que se conocerá el miércoles tras las sucesivas cribas con los 15 mejores y después con los ocho que se irán eliminado en formato match play. Josele Ballester (Arizona State, ASU), Albert Boneta (New Mexico) y Samuel Espinosa Trueba (Chattanooga) forman parte de los 156 jugadores (150 de 30 equipos y seis individuales) que se dan cita en Arizona. Jaime Montojo (Texas A&M) acude como reserva en los aggies.
El castellonense Ballester espera mantener el alto nivel desplegado al final de temporada después de un inicio primaveral algo flojo. «El reto como equipo es meternos con los ocho mejores en el match play y luego a por todas. En el torneo individual aspiro a hacer un gran torneo y seguir en la misma línea que últimamente», explica el levantino de ASU. El catalán Boneta sólo pide «mantener el juego de los Regionals ceñirme a un par de cosas en cada vuelta y el resultado ya vendrá solo». El cántabro Espinosa tiene claro que «la semana va a ser muy dura, pero estamos preparados para el reto porque nos medimos a los mejores del mundo y es una experiencia increíble». Montojo, compañero de Sam Bennett en Texas A&M, subraya que el nivel en Estados Unidos es «brutal» y, como consecuencia, «eso te ayuda a trabajar y a mejorar».
Ballester abrirá fuego con uno de los principales aspirantes al trofeo, Michael Thorbjornsen (Stanford), y con Calum Scott (Texas Tech). Las apuestas para la clasificación individual colocan también arriba al número uno del mundo, Ludvig Aberg (Texas Tech), Gordon Sargent (Vanderbilt), Ryan Burnett (North Carolina), Ben James (Virginia), Mateo Fernández de Oliveira (Arkansas) y Drew Goodman (Oklahoma). Ben Crenshaw (Texas, 1971, 1972 y 1973) y Phil Mickelson (Arizona State, 1989, 1990 y 1992) comparten el récord de coronas individuales de la NCAA. Y, como dato curioso, pasado mañana se cumplen 10 años del 61 que se marcó Jon Rahm en la final de Atlanta.
