Hay cuatro campeones del Open Championship jugando esta semana en el Yas Links. Dos de ellos, Francesco Molinari (2018) y Shane Lowry (2019) comparten el liderato a falta de 18 hoyos. El tercero, Padraig Harrington (2008 y 2009), ocupa la séptima plaza tras entregar la mejor tarjeta del moving day este sábado (64 golpes). Incluso el cuarto, sin estar metido en la pelea por el triunfo como los otros, ha pasado el corte y aún tiene a tiro una gran clasificación con una buena vuelta el domingo. Es Henrik Stenson, puesto 42º. Seguimos para bingo…
El tercer líder del Abu Dhabi HSBC Golf Championship con un total de -13 es Min Woo Lee. El joven australiano no ha ganado todavía el Open Championship, pero sí que ha levantado el Open de Escocia. Además, en la cuarta plaza, a un golpe del liderato, está Grant Forrest, un señor escocés, para más señas, y empatado con él transita Victor Perez, que sí, que es francés, pero reside en St Andrews y ha ganado el Alfred Dunhill Links Championship.
Hacemos balance por si alguno se nos ha perdido, que todo es posible entre tanto vericueto. En el top 7 de Abu Dhabi a falta de una jornada de golf tenemos a seis golfistas con pedigrí, más o menos marcado, de links. Seis en el top 7. A ver si al final resulta que, efectivamente, aunque no estemos en Escocia y se eche en falta algún detalle genuino de este estilo de campos, por ejemplo algún que otro pot bunker o la calidad extrema de los greenes, a este Yas Links hay que llamarlo de usted, por su nombre y considerarlo un links en toda regla. Se lo está ganando a pulso y así lo atestigua su clasificación.
Esto no es un Open Championship, pero desde luego en emoción no le va demasiado a la zaga. El moving day ha diseñado una clasificación apasionante. Tenemos a tres líderes, seis jugadores separados únicamente por dos golpes, 15 por tres, 22 por cuatro… La parte alta de la clasificación está abigarrada y con multitud los que mañana tendrán opciones de ganar, entre ellos el español Pablo Larrazábal (-9), a cuatro golpes de los tres líderes.
El torneo está muy bonito porque cada día ha permitido ver vueltas muy bajas, pero prácticamente todas se han hecho en las primeras horas del día, desde luego no en los últimos partidos. Esto se debe a que el viento suele saltar a partir de las doce del mediodía, justo cuando entran en acción los golfistas que están mejor clasificados. Así las cosas, lidian con condiciones peores y, en consecuencia, no suelen entregar tarjetones. Quiere esto decir que no se debe descartar que el ganador final de Abu Dhabi venga de bastante atrás, quién sabe si a cuatro o cinco golpes. No es fácil porque hay mucho jugador arriba al que superar, pero precisamente por eso, van a salir a jugar bastante antes y tendrán mejores condiciones durante más tiempo. Ojito con las posibles remontadas…
El día del movimiento del Yas Links nos ha dejado muy buenas historias de golf. Por ejemplo, la vuelta de 64 golpes de Harrington a sus 51 años, incluidos esos seis birdies consecutivos del 11 al 16. El irlandés tiene entre ceja y ceja superar el récord de Miguel Ángel Jiménez como ganador de más edad en el Circuito Europeo. El malagueño detuvo el contador en 50 años y 133 días cuando ganó el Open de España en 2014.
Otra gran historia es la de Sebastian Soderberg (-12). El sueco, que tiene el pedigrí de los otros en los links, ha hecho hoy algo excepcional. Jugaba con el español Santi Tarrio y arrancó la vuelta como una moto. Metió un parcial de cuatro menos en siete hoyos y se metió arriba en la clasificación. Justo ahí llegó el tío del mazo y lo tiro al suelo. Hizo triple bogey en el hoyo 8, par 3, después de mandarla al agua pateando desde el antegreen… Cualquiera diría que ahí había terminado su gran remontada. Para nada. Su reacción fue galáctica. Cinco menos en los siguientes cinco hoyos y de nuevo metido en la batalla. Hay que tenerlos muy bien puestos.
La clasificación está muy cargada y tiene un potencial impresionante. De los 15 primeros, el escocés Connor Syme, sí otro escocés en la zona noble, es el único que no tiene victorias en el DP World Tour. Casi nada. Todos en fila india y repartiendo mandobles en los últimos 18 hoyos. Como para perdérselo.
