19 de enero de 2014. Domingo. Abu Dhabi Golf Club. Batalla de gigantes. Mickelson, McIlroy y Jiménez aplastan la hierba que pisan en medio del fragor de sus tanques. Son los grandes nombres, los grandes favoritos en los últimos 18 hoyos.
Al otro lado de la trinchera, a machetazos y con la cara descubierta, Pablo Larrazábal los mira de frente, a los ojos, uno a uno. Mentón arriba. En su salsa. Como le gusta. Cuanta más madera, mejor.
Aquel día empezó así, pero acabó al revés. Pablo terminó asaltando los tanques, entrando victorioso en el green del hoyo 18 y portando feliz bajo el brazo el halcón plateado. Una victoria enorme, con Mickelson a su derecha y McIlroy a su izquierda. Sólo faltaba Tiger Woods para completar esa foto, pero el californiano eligió una buena semana para no jugar en Abu Dhabi. Aquel día no había quien derrotase a Larrazábal.
Así lo contamos en Ten Golf en 2014: