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Rose, Fitzpatrick, MacIntyre y Noren valoran su papel y confían en su sucesor

Notable alto a la gestión de Keith Pelley en el DP World Tour

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Keith Pelley - Rory McIlroy
Keith Pelley abraza a Rory McIlroy en el último Scottish Open. © Mateo Villalba / Golffile

La semana está siendo movida en los despachos. Al anuncio de la marcha a final de año de Martin Slumbers al frente del Royal and Ancient le siguió a las pocas horas el adiós de Keith Pelley como jefe ejecutivo del DP World Tour. El canadiense, que ayer cumplió 60 años, ha sido contratado como presidente y director general de Maple Leaf Sports Entertainment, empresa matriz de cuatro franquicias deportivas con sede en Toronto: Maple Leafs de la NHL, Raptors de la NBA, Toronto FC de la MLS y Argonauts de la CFL.

Las noticias sobre la desvinculación del directivo que ha estado al mando de las operaciones en el DP World Tour durante los últimos ocho años y medio cruzaron todo el planeta y alguno de los jugadores europeos que disputan estos días el Sony Open en Hawái hablaron al respecto a preguntas de Golfweek. Justin Rose, Matt Fitzpatrick, Robert MacIntyre y Alex Noren, con experiencia todos en la Ryder Cup defendiendo los galones del equipo europeo, dan un notable alto a la gestión de Pelley y ven con buenos ojos que su sustituto sea Guy Kinnings, actual director ejecutivo adjunto y director ejecutivo de la Ryder Cup, quien se convertirá el 2 de abril en el nuevo director ejecutivo del Tour Europeo.

«No lo vi venir. Es canadiense y esto le da la oportunidad de volver a casa», arranca Justin Rose. «Nunca se sabe cuándo aparecerán este tipo de ofertas, pero también es un momento difícil. Hay mucho que desempacar y descubrir en este momento. Sería bueno que hubiera claridad antes de que se vaya», subraya el inglés.

Rose admite que «Keith siempre ha sido un disruptor del juego en el buen sentido. Siempre ha buscado ángulos, formas de hacer crecer el juego, siempre ha pensado un poco diferente a los muchachos que han estado antes en su posición. Siempre he disfrutado su perspectiva». El veterano jugador comenta que «la bola de cristal hubiera sido genial porque ha habido algunas oportunidades en la forma en que ha ido el golf donde el Tour Europeo podría haberse posicionado de una manera diferente y posiblemente fortalecer el circuito a corto plazo. No sé cómo se relaciona este nuevo acuerdo con el capital privado, por ejemplo, si se concreta, con el Tour Europeo. Así que tal vez siga siendo un buen paso para el Circuito».

Sobre la toma de control de Kinnings, el inglés afirma que «es un tipo encantador con quien estar. Ha estado haciendo un gran trabajo en el PGA Tour y en el DP World Tour. Desde la alianza siempre pensé que él estaba entre los candidatos para un puesto importante en una de las giras, así que esto no me sorprende».

Más lacónico, Matt Fitzpatrick se alegra por Keith Pelley y entiende que su principal legado tras su travesía desde 2015 hasta ahora en el DP World Tour sea «probablemente regalar a los 10 mejores jugadores de Europa una tarjeta del PGA Tour. Yo diría que sí, sí».

Robert MacIntyre no entra a valorar si la decisión es buena o mala para el Tour pero sí comenta que «me llevé genial con él y siempre tendré su número para coger el teléfono. Él me llevó al PGA Tour, ¿no? Creo que tal como va el mundo del golf, será una gira mundial. Él me ha dado un camino para lograr los sueños que siempre quise lograr. Le deseo buena suerte en su nueva etapa», apunta el escocés.

Por último, Alex Noren rebobina y dice que «es un clima muy diferente en el mundo del golf que cuando él empezó», aunque también habla del porvenir: «No sé cuál será el mejor futuro para todas las giras. Estoy feliz de que tengamos muchos buenos torneos en Europa. Sólo desearía que pudiéramos combinar los tours un poco más y obtener puntos de la FedEx Cup en algunos eventos más del DP World Tour, por lo que tendría sentido que más golfistas del PGA Tour jugaran ambas giras. Creo que beneficiaría a ambas».

Centrándose más en la figura de Pelley, el sueco explica que «Keith tenía mucha visión de futuro y trató de competir con el PGA Tour. Conseguir esos torneos de Rolex fue enorme. Simplemente creo que en el futuro podríamos combinarlos más y como europeo me encantaría». De Kinnings asevera que «es muy competente, muy agradable pero también muy profesional. Ha hecho un gran trabajo con la Ryder Cup y creo que hará un buen trabajo».