Santi Tarrio (-3) ha firmado un gran inicio en el Acciona Open de España. Le queda el ligero sinsabor de que no ha sido capaz de exprimir mejor su gran golf. En cualquier cosa, no hay muchas pegas que poner. Gran actuación de tee a green, muy buenos tiros y alguna que otra buena oportunidad que se marchó al limbo. Un buen reflejo de lo que le ha venido ocurriendo esta temporada. «He jugado mejor de lo que dicen los resultados», asegura el gallego.
No obstante, y aunque parezca extraño, esta vez no toca escribir de su ronda de hoy, sino de la de hacer tres días en el Old Course de St Andrews. Súper historia. Surrealismo aplicado al golf. Una más. Santi, que tenía cerrado el alojamiento hasta el domingo, tuvo que improvisar un hotel deprisa y corriendo cuando confirmaron que el torneo iba a terminar el lunes. Encontró habitación, pero la cama no era precisamente la ideal para él. «Yo no soy el tipo más normal durmiendo, me pongo boca abajo y sin almohada y el colchón era bastante blando. Me levanté con un pinzamiento curioso en la zona lumbar», asegura.
Y tan curioso… Tuvo que ir al camión de los fisios para tratarse y estuvieron valorando seriamente la posibilidad de una retirada sin jugar la ronda final del postergado Alfred Dunhill Links Championship. Lo habló con Diego Suazo, su caddie, y los propios fisios le recomendaron reservarse para esta semana en el Open de España. Sin embargo, finalmente decidió salir al campo. No todos los días se tiene la oportunidad de jugar en el Old Course. «Me metí dos pastillas de caballo y pegué siete bolas antes de salir a jugar, dos hierros 6, un hierro 7, tres wedges y un drive», relata. Cinco horas después entregaba en la casa club una tarjeta de 64 golpes, ocho bajo par. Su mejor resultado del año empatado con la tercera ronda de Kenia y la segunda de Singapur. Surrealismo en vena con moraleja. «No está mal salir a jugar de vez en cuando con la convicción de que no tienes nada que perder. Estuvo bien», afirma.
Tarrio tiene los deberes hechos este año. La tarjeta está salvada, aunque no está contento. «Digamos que lo arreglé todo en Kenia con un tercer puesto, pero no puede ser que con lo bien que he jugado al golf este año, sólo tenga dos top 15. Estoy un poco cansado de acabar en el puesto 50º los torneos. Venía en progresión todos los años, haciéndolo cada temporada un poco mejor, y en esta siento que me he quedado un poco estancado. He jugado bien, pero por unas cosas o por otras, a veces por el putt, otras porque un mal golpe me ha penalizado mucho, pues los resultados no han sido mejores. No digo ganar porque es muy difícil, pero tendría que haber terminado más veces en el top 10», explica con su habitual y genuina sinceridad.
En cualquier caso, Santi avisa que el año no está acabado. «Quedan tres torneos y siento que lo puede hacer bien cualquiera de estas semanas porque estoy jugando a un gran nivel», remarca. Llegará la gran semana, aunque seguramente, como ocurre tantas veces en este deporte, será cuando menos se lo espere.
