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Las cuentas que ponen a Jorge Campillo con pie y medio en el US Open

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Jorge Campillo en la segunda ronda del Commercial Bank Qatar Masters. © Golffile | Thos Caffrey
Jorge Campillo. © Golffile | Thos Caffrey

El Coronavirus le birló a Jorge Campillo un Grande con la cancelación del Open Championship, para el que estaba clasificado por el top 20 del año pasado en la Race to Dubai, y ahora se lo puede devolver con el US Open.

La USGA confirmó este lunes que este año no habrá previas de clasificación como antaño y que las plazas sobrantes se rellenarán con exenciones. Aún tienen que aclarar oficialmente los criterios, pero lo lógico es que se concedan más plazas por ranking mundial y otras a los grandes circuitos, tipo PGA Tour, European Tour, Asian Tour o Japan Tour. Por cualquiera de los dos criterios, el jugador extremeño, que antes lo tenía muy complicado, tendría ahora mismo muchísimas papeletas para jugar en Winged Foot, Nueva York, del 17 al 20 de septiembre. Siempre y cuando, claro, se acabe celebrando.

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Vamos con las cuentas para explicar exactamente cuál es la situación en estos momentos. Aún no está confirmado de manera oficial, pero todas las fuentes apuntan a que el número de jugadores participantes en el US Open será de 144, doce menos que el año pasado en Pebble Beach. La razón no es otra que la fecha. Al jugarse en septiembre en lugar de junio hay menos horas de luz y, por tanto, menos capacidad para meter partidos.

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Partiendo de esos 144 posibles jugadores, a día de hoy están ya clasificados de manera oficial un total de 64, distribuidos de esta manera:

– (9) Campeones del US Open en los últimos 10 años: Kaymer, Koepka, McDowell, McIlroy, Rose, Simpson, Spieth, Dustin Johnson y Woodland.

– (3) Campeones en 2019 del US Amateur, US Junior Amateur y US Mid Amateur: John Augenstein, Lukas Michel y Preston Summerhays.

– (1) Campeón en 2019 del British Amateur: James Sugrue

– (1) Campeón de la Medalla McCormack (Número 1 ranking mundial amateur): Cole Hammer

– (4) Campeones del Masters de los últimos 5 años: Sergio García, Patrick Reed, Danny Willett y Tiger Woods.

– (3) Campeones del Open Championship de los últimos 5 años: Francesco Molinari, Shane Lowry y Zach Johnson.

– (3) Campeones del PGA Championship de los últimos 5 años: Jason Day, Justin Thomas y Jimmy Walker.

– (1) Campeón del US Senior Championship 2019: Steve Stricker

– (7) Top 10 del US Open de Pebble Beach 2019: Chesson Hadley, Louis Oosthuizen, Jon Rahm, Chez Reavie, Xander Schauffele, Adam Scott y Henrik Stenson.

– (17) Top 30 de la FedEx Cup 2019: Ancer, Cantlay, Casey, Conners, DeChambeau, Finau, Fleetwood, Fowler, Glover, Howelll III, Sungjae Im, Kisner, Kokrak, Kuchar, Leishman, Matsuyama y Snedeker.

– (15) Campeones del PGA Tour (500 puntos FedEx Cup) entre el US Open de 2019 y el US Open de 2020: Nate Lashley, Matthew Wolff, Dylan Frittelli, JT Poston, Joaquín Niemann, Juan Sebastián Muñoz, Cameron Champ, Kevin Na, Lanto Griffin, Brendon Todd, Tyler Duncan, Cameron Smith, Andrew Landry, Nick Taylor y Tyrrell Hatton.

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Estos 64 jugadores tienen ya su plaza garantizada para el US Open de Winged Foot. Además de ellos, hay 14 plazas más potenciales correspondientes a los 14 torneos del PGA Tour que aún se deben jugar entre el reinicio de la competición (Charles Schwab Challenge) y el US Open. Decimos que son plazas potenciales porque depende de quién sea el ganador restará una plaza o no. Es decir, si el campeón del torneo ya está clasificado no resta plaza y viceversa. Así las cosas, en el peor de los casos (si todos los campeones no estuvieran clasificados ya de antemano) habría 78 plazas adjudicadas y en el mejor (si todos estuvieran ya clasificados) habría 64. Lo normal es un término medio y que finalmente caigan por esta exención unas 6-7 plazas más.

A este número de jugadores habría que añadir el top 60 del ranking mundial que a día de hoy se puede dar ya por hecho que está clasificado. Quitando a los muchos que ya están metidos en el US Open por otras exenciones, a día de hoy habría 20 clasificados más. O lo que es lo mismo, y seguimos con las cuentas, en el mejor de los casos habría 84 golfistas ya clasificados (64 más los 20 del top 60 mundial) y en el peor serían 98 (78 más los 20 del top 60).

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Estas cuentas hechas al milímetro suponen que a día de hoy habría que rellenar entre 46 y 60 plazas para completar las 144 del US Open. Las cifras cuadran perfectamente, ya que el año pasado se concedieron 57 plazas a las diferentes previas que se celebraron por todo el mundo.

La USGA aseguró en su comunicado de ayer que las plazas se adjudicarán a las diferentes exenciones. Por ejemplo, si todas las plazas fueran al ranking mundial supondría que entrarían en el US Open aproximadamente hasta el puesto 110-130 de la clasificación, lo que por supuesto aseguraría la presencia de Jorge Campillo (actualmente es el 80º del mundo) y daría bastantes opciones a Adri Arnaus (actualmente 106º del mundo).

Esta opción, en cualquier caso, parece descartada a juzgar por las palabras de John Bodenhamer, manager general de la USGA. «Vamos a tener muchos más matices que eso», dijo. «Vamos a ver cómo se ve un campo abierto de EE. UU.». El objetivo es que se parezca lo más posible a un US Open habitual dentro de las dificultades.

Parece razonable pensar, así, que no se otorguen todas por ranking mundial y sí haya algunas para los circuitos. Hay que pensar que el US Open celebraba una previa en Europa, donde el año pasado dio 14 plazas, otra en Japón donde dio 3 y las de Estados Unidos donde se otorgaron 40 plazas más. No sería descartable, por tanto, que se dieron entre 5-10 plazas a la Race to Dubai, otras tres al Japan Tour y entre 10 y 20 más a la FedEx Cup. Si el reparto fuera de esa manera, es decir con 5-10 plazas para la Race to Dubai, Campillo también estaría prácticamente metido, tanto si se mirase el final de la temporada pasada, donde Campillo acabó el vigésimo y le correspondería la séptima plaza (sacando de la ecuación a los que acabaron entre los 20 mejores y ya están clasificados por otras exenciones), como si se cogiera la vigente de este año, donde Campillo tendría la quinta plaza. Es más, si la USGA aplicara este criterio, beneficiaría directamente a otro jugador español, Pablo Larrazábal, que ahora mismo obtendría la tercera plaza libre por la Race to Dubai.

La USGA también contempla la opción de repartir algunas invitaciones a dedo a determinados jugadores que se queden fuera y que aseguren un mayor lustre al torneo. Es el caso ahora mismo, por ejemplo, de Phil Mickelson, Número 61 del mundo, o el propio Ernie Els, que ya recibió una invitación el año pasado.

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Sea como fuere, la realidad es que Campillo tiene pie y medio en el US Open de Winged Foot. Sería su debut en este Grande y el tercero diferente de su carrera, más allá del Open y del PGA donde ya ha participado. Sólo le quedaría el Masters para completar su particular Grand Slam de participación.

En cuanto al ranking mundial habrá que estar pendiente de cuándo se cierren los plazos para clasificar para el US Open. Tampoco lo ha hecho oficial la USGA, no obstante, si atendemos a lo realizado otros años, lo normal es que haya dos cierres de plazo, uno un mes antes del US Open, el 17 de agosto, y otro el lunes previo al torneo, el 14 de septiembre. En este sentido, habrá que estar muy pendientes de la decisión que tome el ranking mundial sobre cuándo se reanudará la clasificación. Si es con el Charles Schwab Challenge supondrá un perjuicio notable para los miembros del European Tour, ya que el PGA Tour tendrá una ventaja de mes y medio en la que podrán sumar puntos mientras que en Europa no se puede jugar. Eso sí, aunque fuera de este modo, Campillo nunca perdería tantos puestos como para salirse del top 100 mundial antes del US Open.