– La media de golpes en la primera jornada del Sentry fue de 71,48 golpes (recordemos que el Plantation es un par 73), pero es que en la segunda se ha ido hasta 69,64, casi dos golpes menos. El viernes ha soplado algo menos el viento y muchos jugadores se van haciendo con el gobierno de los greenes. En cualquier caso, el ritmo de birdies en la zona caliente de la clasificación comienza a ser inasumible para unos cuantos jugadores, algunos de alto copete. Justin Thomas (-5), por ejemplo, ha reaccionado (vuelta de 67), pero seguramente se ha quedado ya sin opción alguna de victoria, pues va a salir mañana a doce golpes de la cabeza y con 29 tipos hambrientos por delante. Otros como Morikawa (-8), DeChambeau (-9), Brooks Koepka (-10) o Xander Schauffele (-10), van a salir ya muy exigidos, unos más que otros.
– Como ha quedado escrito en la crónica, Cameron Smith, el líder, ha igualado con su acumulado de -17 el mejor registro en las dos primeras vueltas de este torneo en este campo, el Plantation de Kapalua, hasta ahora en poder de Ernie Els en exclusiva, que lo firmaba en 2003 y que luego ganaría el torneo. ¿Se van a romper o a igualar más barreras esta semana? El campo está de dulce, los jugones en plena forma y el parte meteorológico no anuncia grandes tragedias, aunque mañana, sábado, quizá sople un poco mas el viento, con rachas que pueden llegar a los 20 kilómetros por hora. En cualquier caso, no descartemos las campanadas. En la presente edición se han visto ya tres tarjetas de 64 golpes, nueve menos, las que han firmado en la segunda ronda Sam Burns, Patrick Reed y el líder, Cameron Smith, aunque este registro, siendo espectacular, se deja ver casi cada año en el recorrido hawaiano, rico en eagles y birdies. Otra cosa más seria son las tarjetas de 63 golpes…
– En las 23 ediciones del Sentry ya disputadas en el Plantation de Kapalua se ha visto un total exiguo de nueve tarjetas de 63 golpes, diez menos en el día. El último en firmar una fue Brooks Koepka en 2016 y bien le vendría a este jugador algo así para meterse en la pomada… Las otras ocho las entregaron David Duval (1999), Mike Weir (2002 y 2005), Rocco Mediate (2003), Jonathan Byrd (2003), Rory Sabbatini (2010), Robert Garrigus (2011) y Steve Stricker (2012).
– Ahí no queda el asunto, puestos a esperar una gesta que revolucione el torneo durante el fin de semana. El mejor registro en este campo es de 62 golpes y lo han conseguido cinco jugadores en la historia, desde que el torneo llegara a Kapalua. A saber: K. J. Choi (2003), Graeme McDowell (2011), Hideki Matsuyama (2015), Chris Kirk (2015) y él último, la hazaña más reciente de todas, Xander Schauffele, cuyo titánico esfuerzo final le valió para ganar el torneo en 2019, saliendo el domingo a cinco golpes de la cabeza.
La pregunta es: ¿cabe un 61, doce menos en el día, en este vergel de campo? Y ya puestos, otra: ¿cabe esta misma semana? Se antoja complicadísimo, por supuesto, pero mejor será no descartarlo.
