Inicio Grandes Circuitos PGA Tour ¿Y qué tal si empezamos a penalizar seriamente el juego lento?
Crónica de la primera jornada del THE PLAYERS Championship

¿Y qué tal si empezamos a penalizar seriamente el juego lento?

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Jordan Spieth
Jordan Spieth acabó su ronda con muy poca luz ya en el TPC Sawgrass.

Y entonces, aparece Collin Morikawa (-7) y los pone a todos en fila en este THE PLAYERS 2023, con permiso de Chad Ramey (-8), sorprendente líder en solitario después de una primera jornada que no ha podido terminarse por falta de luz… 

(En este punto de la crónica, precisamente a causa de esta inevitable suspensión del juego, hacemos un paréntesis casi obligado: a lo mejor, los señores jugadores y ejecutivos del PGA Tour debieran considerar de una maldita vez la posibilidad de tomarse en serio esto del juego lento. 

Es insufrible. Es un espanto. Es casi bochornoso. Es incluso, si nos ponemos estupendos, una falta de consideración al aficionado. Pero sobre todo es un bodrio. Y, para colmo, un bodrio habitual. Una semana detrás de otra a aquel lado del charco. Y menos mal que las condiciones de juego han sido buenas…

Justin Suh, por ejemplo, que ha salido en el último partido del día, a las 13,51 horas, se marchaba al hotel con el hoyo 16 por terminar y con el 17 y el 18 por delante, todo eso después de haber estado en el campo mas de cuatro horas y cuarenta minutos. Aún peor es lo de Dylan Wu, que salía a la misma hora, pero por el tee del 10, y todavía tiene por delante los hoyos 7, 8 y 9. Oiga usted, semejantes tiempos, en un torneo de club, tienen un pase. Al fin y al cabo hay tipos que pegan más de cien golpes y además no llevan un caddie que aligere peso, rutinas e intendencias varias… ¿De verdad se está por la labor de pulir un producto atractivo? Pues a lo mejor hay que empezar por algo tan sencillo como esto.

Después, claro, a la larga, mientras las rutinas en los greenes se vayan alargando y alargando (algunas dan ya dentera), no quedará más remedio que abrochar torneos de no más de ochenta jugadores, no vaya a ser que los muchachos no dispongan de las seis horas de rigor (hacia eso vamos) para rematar 18 hoyitos de golf).

Decíamos que esta semana parece el turno de Morikawa, aunque Scottie Scheffler (-4) sigue percutiendo, siguiendo el ejemplo de su gran rival por el trono, Jon Rahm, que en eso de percutir no tiene parangón. Pero es que si miramos el top ten del torneo, nos encontramos al propio líder, Ramey, que está jugando su segunda temporada en el PGA Tour y viene de fallar tres cortes seguidos, a los novatos Griffin y Suh, a Min Woo Lee… El fondo de armario de la élite del golf mundial, LIV aparte (estancado), del PGA Tour, es inagotable, porque lejos de provocar duda el leaderboard, casi afila el interés… 

A estas alturas, con una sola ronda disputada, casi podemos estar seguros de que Rory McIlroy (+4), Matt Fiztpatrick (+4) o Harris English (+6) no van a ganar esta semana. Y de que Hideki Matsuyama (+2) y Will Zalatoris (+2) lo tienen también casi imposible. Podemos estar seguros de que Justin Thomas (+1) y Kurt Kitayama (+1), brillante ganador hace unos días en el pequeño infierno de Bay Hill, o incluso Patrick Cantlay (PAR) y el mismo Jon Rahm (-1) se han quedado ya sin margen de error… Pero el fondo de armario lo cubre todo con naturalidad y suficiencia maravillosas. Jason Day (-2) sigue asomándose a las alturas paso a paso; Jordan Spieth (-3) se ha situado razonablemente bien, igual que Justin Rose (-3) o Viktor Hovland; Sam Burns (-4) y Cam Davis (-3) vuelven a la carga, que ya nos estábamos olvidando de ellos… 

Si uno lo piensa fríamente, pocos campos parecen tan hechos a la medida de Morikawa como este Stadium course del TPC Sawgrass. Lamentablemente para el californiano, queda demasiada tela por cortar y demasiado fondo de armario que desempolvar esta semana.

Resultados en directo del THE PLAYERS Championship 2023