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THE CJ CUP | CRÓNICA DE LA TERCERA JORNADA

Hoy tocaba pelarse las manos de agarrar fuerte los remos…

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Jon Rahm durante la tercera jornada del The CJ Cup 2022. © Golffile | Eoin Clarke
Jon Rahm durante la tercera jornada del The CJ Cup 2022. © Golffile | Eoin Clarke

Rory McIlroy (-13) es el líder en solitario del The CJ Cup después de firmar un 67 en la tercera jornada, registro de cuatro menos en el día que le acerca un poco más al triunfo, por supuesto, y por tanto también al Número Uno del mundo. Tal y como están las cosas, de hecho, hasta podría valerle un segundo puesto, ya que Scottie Scheffler (PAR) sigue sin carburar (recordemos que si Rory termina segundo en solitario necesitaría que el actual Número Uno terminara 34º empatado o peor).

El Congaree Golf Club se ha puesto hoy muy serio, muy pejiguero. Greenes cada vez más firmes y que siguen estando muy rápidos. Así que hay que valorar el 67 del norirlandés, aunque otros como K. H. Lee (-12), Tommy Fleetwood (-8), Maverick MacNealy (-8) y Cameron Young (-5) lo hayan mejorado, con tarjetas de 66 golpes. De todos ellos, sólo el coreano Lee parece en disposición de luchar por el triunfo (cómo está el golf coreano masculino, por cierto).

Hay otro candidato serio y de gran calado que es Jon Rahm (-12). Y eso a pesar de haber sufrido más de la cuenta, ya que a falta del último tercio de la ronda parecía alejarse irremisiblemente de la cabeza, porque además le tocaba afrontar un tramo del campo donde realmente es complicado arreglar vueltas y tarjetas… Sin embargo, el vasco finalizaba con un parcial de tres menos en los últimos siete hoyos del campo, arrancando la remontada con un birdie en el último par 5 (hoyo 12). No es ésta una cuestión menor o anecdótica: nadie en el campo ha superado este registro de tres menos en ese tramo y tan solo Troy Merritt lo ha igualado, saliendo a jugar tres horas y media antes que Jon, en los primeros partidos, con los greenes todavía algo más tiernos por la humedad mañanera…

Ayer levitaba sobre la alfombra roja de las estrellas. Hoy tocaba pelarse las manos remando y ya sabemos que Rahm también es capaz de rendir a las duras. No se le caen los anillos. Hoy ya no entraban los puros del sábado. Vaya, ni tampoco los puritos. Porque por los primeros nueve el español no había dejado de fabricarse opciones de birdie desde distancias que iban de los cuatro a los seis o siete metros, pero su bola esta vez no encontraba el camino. No sólo eso, es que además tampoco acertaba con otros más cortos para salvar las primeras situaciones delicadas, así que los bogeys iban cayendo y el liderato alejándose.

Jon no encontraba el camino del hoyo… Hasta que lo encontró en el momento más oportuno. Fue en el 17, el hoyo más difícil del campo, donde el de Barrika se sacaba un fabuloso birdie de la manga, pegando el segundo tiro desde la arena, a unos 170 metros de la bandera, y enchufando un putt, al fin, de algo más de seis metros. Antes, en el 16, había salvado un par de antología tras fallar la calle unos cuarenta metros a la derecha. Así es el ‘morrosko’, aunque esta vez se aliara con la buena suerte, primero para encontrar la bola (había jugado una provisional), después por poder dropar sin penalidad (una valla publicitaria se interponía en su camino, allá en la lontananza). Para azar y buena suerte, en todo caso, lo de Rory: cada rebote después de fallar claramente la calle le salía que ni pintado…

Mañana, según parece, los greenes incluso pueden ganar un poquito más de firmeza y hasta de velocidad, así que el desenlace será, a buen seguro, dramático. Jon, al fin y al cabo, ha pasado hoy el mal trago con una vuelta por debajo del par (70), y mantiene sus opciones intactas. El duelo con Rory puede ser mayúsculo, de auténticos titanes. No van a jugar juntos en el partido estelar (Jon sale en el penúltimo grupo junto a Taylor Moore y Aaron Wise), pero tampoco sería extraño que, sin menospreciar a nadie, ambos transformaran la lucha por el triunfo, antes o después, en un mano a mano a cara de perro.

Resultados en directo del The CJ Cup in South Carolina