Graeme McDowell es el tercer golfista del PGA Tour que se ve obligado a abandonar un torneo por un positivo de COVID-19. Eso sí, en este caso el positivo no es suyo sino de su caddie Ken Comboy. La noticia ha sido adelantada por Golfweek tras hablar directamente con el propio Graeme McDowell.
Cameron Champ, segundo positivo por COVID-19 en el PGA Tour
«Para seguridad del resto de compañeros y por la mía propia y de mi familia, este miércoles por la mañana me voy a hacer un test y después volaré directamente a Florida. Me voy de aquí y ya en mi casa decidiré si me pongo o no en cuarentena», explica.
Comboy sospecha que pudo haber estado expuesto al virus después del Charles Schwab Challenge de Texas hace dos semanas. El avión privado de McDowell era demasiado pequeño para viajar todo el grupo, por lo que el veterano caddie se metió en un vuelo comercial a Orlando repleto de gente. El lunes de la semana pasada él y McDowell asistieron al funeral de un amigo y luego condujeron a Hilton Head, Carolina del Sur para el RBC Heritage.
Bienvenidos al parque de atracciones: DeChambeau caza de uno un par 4 de 420 yardas
El jueves Comboy dijo que tenía dolor de garganta leve y se fue a la cama temprano. Después de fallar el corte el viernes por la mañana, la pareja condujo a casa a Orlando esa misma tarde con el entrenador de McDowell, en un viaje que duró seis horas.
El sábado por la mañana Comboy informó del persistente dolor de garganta en un cuestionario diario que los jugadores y los caddies reciben del Tour. Un médico lo llamó poco después y le aconsejó una prueba. McDowell dijo que su caddie regresó a Hilton Head el sábado por la noche para ser examinado en las instalaciones del Tour a la mañana siguiente. El resultado positivo se ha sabido el martes por la tarde. El único síntoma que Comboy ha desarrollado ha sido perder el sentido del olfato, que se manifestó ayer. No había viajado a Connecticut y está en cuarentena en Orlando.
Lo que más impresiona a Rahm de DeChambeau no es precisamente la distancia…
El mismo McDowell dio negativo el lunes y no ha mostrado síntomas. Se sintió un poco fatigado la semana pasada en Hilton Head, pero lo atribuyó a la reanudación del golf y a las secuelas del funeral de su amigo. La alarma aparece ahora con el positivo de su caddie y amigo. «Somos un equipo muy unido. Nos alojamos juntos la semana pasada, pasamos seis horas en un automóvil. Él está portando el virus, así que de alguna manera yo también tengo que portarlo», asegura.
Ronda de prácticas en el Travelers con los hermanos Koepka y Shane Lowry
McDowell informó al Tour de sus contactos en el Travelers Championship. Eso incluye una ronda de práctica el martes en TPC River Highlands en compañía de Brooks Koepka, su hermano Chase y Shane Lowry. Koepka, su caddie Ricky Elliott y el entrenador Claude Harmon III, planean volver a ser examinados temprano este miércoles por la mañana como medida de precaución.
«Creo que estamos tratando de hacer todo lo posible para mitigar el riesgo, pero al fin y al cabo es imposible mitigar el 100% del riesgo», dijo McDowell. “La burbuja es especulativa en el mejor de los casos. Es difícil para el Tour, incluso con todos sus recursos, controlar a todos todo el tiempo».
Watney voló en el avión de Sergio García al RBC Heritage
A pesar de su prueba negativa, el campeón del US Open de 2010 dijo que su prioridad inmediata era proteger a otros jugadores y caddies. «Me siento incómodo de estar aquí», dijo.
Como decimos, éste es el tercer positivo por COVID-19 en el PGA Tour, después del de Nick Watney la semana pasada y Cameron Champ ayer mismo.
