Corey Conners se ha ganado el derecho a ser considerado candidato serio a la victoria en el Masters de Augusta. Y ahora es cuando el profesor le dice al gamberrete del fondo: «usted, sí, usted, el que se está riendo por eso que acabo de decir, haga el favor de salir de clase…».
Conners acaba de ganar el Valero Texas Open, torneo del PGA Tour que se disputa apenas en el Oaks Course del TPC San Antonio cuatro días antes del inicio del Masters. Lo ha hecho con autoridad, con una vuelta final de 68 golpes, jugando con el tiralíneas de principio a fin. Sus números de tee a green han sido sencillamente escandalosos. En los tiros a green ha sacado a la media del torneo más de nueve golpes, de traca. Pero es que en el compendio de tee a green han sido más de 14 golpes y, por supuesto, ha sido el que más greenes ha cogido. En toda la semana apenas ha fallado 16, cuatro por día.
El de la risa floja dirá, convencido de sus argumentos, hombre, vale, ha ganado la semana antes del Masters, sí, ya sabemos que Conners de tee a green es muy bueno, pero recontra, que es Conners, el canadiense, que esta es su segunda victoria en el PGA Tour, ¿qué te has fumao para considerarlo candidato al triunfo en Augusta, nada menos?
De acuerdo, bajemos a la arena. Conners está en forma, de eso no hay duda. Su swing está engrasado, tampoco hay nada que objetar en esto. Tiene experiencia, pues ha jugado los últimos doce Grandes de manera consecutiva y, voilà, se le da de maravilla el Augusta National. Uy, ya no se escuchan tantas risas.
Resulta que Conners debutó como profesional en el Masters en 2019 (jugó en 2015 como amateur tras acabar segundo en el US Amateur), curiosamente después de ganar por primera vez el Valero Texas. Aquel año, el de su estreno, no le fue muy bien, pasó el corte, pero acabó 46º. A partir de ahí, cuidado, anoten con papel y lápiz, para retener mejor: 10º en 2020, 8º en 2021 y 6º en 2022. Lo sé, ya no se ríe nadie.
Hay que contar con Conners para el Masters. Cierto es que resulta complicado imaginárselo el domingo con la Chaqueta Verde encasquetada, por aquello de la presión, de no haber ganado antes un Grande, pero quién sabe, es un campo que se le da bien, de tee a green es excelso y si le acompaña el putter esa semana todo puede ocurrir. Al menos, convendrán que es un favorito claro a terminar en el top 10.
Conners ha ganado con un golpe de ventaja sobre Sam Stevens (-14) tras una vuelta sin bogeys. Stevens terminaba antes que el partido estelar y cruzaba los dedos a la espera de un resbalón de Conners que no se produjo. Una victoria le habría dado acceso a su primer Masters. Es el Número 278º del ranking mundial y lo mejor que ha hecho es ganar un torneo en el PGA Tour Latinoamérica en 2021. Hace una semana fue tercero en Punta Cana. En siete días ha dejado hecha más de media temporada hecha.
Matt Kuchar y Patrick Rodgers, que compartieron el partido estelar con Conners, no tuvieron su mejor jornada de golf. Firmaron 68 y 73 golpes para terminar en los puestos tercero y quinto. Da rabia no poder ver a Rickie Fowler en el Masters después de los 66 golpes que ha hecho hoy para acabar en el top 10. Finalmente, como Conners ya estaba clasificado para el Masters, no hay ninguna plaza añadida por el Valero Texas. Serán 88 jugadores.
