El WGC Dell Technologies Match Play será el escenario de una nueva batalla por el Número 1 del mundo de golf con cinco frentes abiertos. Defiende la posición el español Jon Rahm y aspiran a conquistarla Collin Morikawa, Viktor Hovland, Patrick Cantlay y Scottie Scheffler.
Obviamente, el futuro de esa primera posición del ranking dependerá directamente de lo que haga Jon Rahm esta semana. El de Barrika impone los límites de hasta dónde pueden llegar los demás. Si el golfista español gana el torneo nada de lo que hagan los otros cuatro importa demasiado.
Sin embargo, por hacermos una idea de cómo está la situación, sí les podemos contar, según los números que ha publicado Nosferatu, el gurú del ranking mundial en las redes sociales, lo mínimo que necesita el póker de perseguidores de Rahm para tener al menos una oportunidad de asaltar el trono mundial.
Así las cosas, el planteamiento no es difícil. Morikawa, actual Número 2, tendrá que llegar al menos a semifinales para darse una opción de desbancar a Rahm. Curiosamente, el primero que podría eliminar esta amenaza de Jon es su buen amigo Sergio García. El golfista de Borriol está encuadrado en el mismo grupo que Morikawa. Si Sergio acaba primero la fase de grupos, habrá desactivado al principal enemigo de Rahm.
A Viktor Hovland, por su parte, no sólo le vale alcanzar las semifinales, sino que como mínimo debe acabar en tercera posición. Es decir, o gana su partido de semifinales o si cae eliminado tendría que ganar luego la batalla por el tercer y cuarto puesto para tener la posibilidad de superar a Rahm. Obviamente, siempre en función de lo que haga Jon. Eso siempre.
Los otros dos lo tienen aún más complicado, como es lógico ya que está más lejos. Patrick Cantlay necesita como mínimo llegar a la final, aunque después la pierda, y a Scottie Scheffler sólo le vale ganar.
En definitiva, todo aquel que quiera arrebatar la primera posición del ranking mundial a Jon Rahm tendrá que jugar muy bien esta semana en el Austin Country Club de Texas. El golfista vasco sigue teniendo la sartén por el mango, aunque ya sabemos que puede ocurrir de todo, mucho más en una semana tan voluble como la del match play. La única posibilidad en la que no dependería de nadie más Jon Rahm sería ganando el torneo. Si llega a la final y cae contra Morikawa, sería superado por el norteamericano. El ranking mundial hace todavía más interesante semana en Texas.
