Sergio García (-4) ha firmado un 68 en la tercera jornada del WGC FedEx St. Jude Invitational, sin duda un resultado más que decente, pero insuficiente en la ardua tarea de meterse en la lucha por la victoria. Necesitaba una vuelta sobresaliente, algo así como la mejor del día, pues no tenía apenas ya margen de error, y hay que señalar que el español no ha estado tan lejos como pudiera parecer…
El arma secreta de Todd se llama ‘Proyecto de Cuarentena’
De entrada, arrancaba como un rayo, con tres birdies por los primeros cuatro hoyos del TPC Southwind, un parcial que ya lo metía en el top ten provisional del torneo. La espléndida serie se completaba con un nuevo birdie en el hoyo 7, tras embocar un purazo de unos diez metros. El asunto pintaba mejor que bien, puesto que su juego de tee a green se mostraba muy consistente y además el de Borriol andaba resolutivo en los greenes y desde todas las distancias.
El único clavo que queda al que agarrarse es el de Sergio, y está al rojo vivo…
Aún iba a patear para birdie en los siguientes hoyos, 8, 9 y 10, con mención especial para la oportunidad del 9, donde pegaba un tirazo desde el rough y después su putt, desde unos tres metros, lamía el borde de la cazoleta. Así que la ronda se mantenía ‘on fire’, como suele decirse. Y en el 11, el par 3 con el green en isla, Sergio no quería que parara el tiovivo… Se iba a por el trapo, pero la bola se quedaba dos metros corta de vuelo, terminaba en el agua y luego tampoco era capaz de minimizar los daños, así que el triple bogey resultante prácticamente se llevaba por delante su remontada. A partir de ese momento ya nada sería igual, aunque iba a cerrar la ronda con seis pares y un birdie, sacando adelante un puñado de meritorias recuperaciones.
Que nadie se tome a chanza a Brendon Todd y su ‘killer putter’
Sergio va a salir el domingo a dos golpes del top ten del torneo, así que conserva muchas opciones de entrar en el cuadro de honor final. Y hoy, igual que el jueves, ha vuelto a dar la sensación de que tiene en su bolsa esa ronda rompedora. Él, además, necesita puntos Fedex para ganar posiciones, y por otro lado sería magnífico marcharse a California, para la disputa del PGA Championship, el primer Grande en este año del Covid, después de rematar un gran fin de semana en un campeonato del mundo.
