Sergio García (+9) ha entregado una tarjeta de 81 golpes en la tercera jornada del Masters de Augusta. Día negro como el tizón para el jugador español. De principio a fin. Arrancaba con un doble bogey como presagio de lo que sería un día duro y áspero y terminaba con un tripateo muy doloroso en el hoyo 18 desde unos dos metros.
Esta tercera ronda de Sergio en el Masters de Augusta se cuela en la historia negra del golfista de Borriol en este torneo. Es su peor resultado aquí desde que debutara un jueves de abril de 1999 como amateur con una tarjeta de 72 golpes, superando el 79 que hizo en la tercera ronda del Masters de 2006. Un día para olvidar en su sexagésima ronda de golf en el Augusta National.
Ciertamente, no se puede rescatar nada positivo. Sergio no ha jugado bien de tee a green y ha sufrido de lo lindo con el putter, cometiendo hasta cuatro tripateos durante su recorrido. Un balance muy negativo al que García tampoco le ponía paños calientes. «He jugado fatal, muy mal y cuando uno juega mal en un campo como éste pasa lo que pasa. No hay más», aseguraba con el rostro serio tras firmar la tarjeta.
La jornada ha sido muy dura en Augusta, una más en una semana que se está revelando como una de las más complicadas en la historia del torneo. «Seguramente esta será la edición más complicada que yo he jugado en toda mi vida. Me recuerda un poco a la de 1999, aunque con la distancia que se le ha añadido al campo en los últimos años, creo que ésta podría ser la más difícil», señaló. Sergio ha perdido muchas posiciones en la clasificación, situándose en el puesto 43º.
