Sin palabras. No sé ni cómo empezar este artículo. Me cuesta encontrar la manera de expresar la alegría que siento por lo que sucedió ayer en Augusta. Estoy muy contento por Chema, por su felicidad.
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Ha tenido un comienzo complicado y en el momento que estaba empezando a recuperar con los birdies de los hoyos 8 y 9 ha fallado el putt del 10. A partir de ahí, su reacción ha sido espectacular. Ha jugado muy bien desde ese momento y se ha metido en el fin de semana. Esto es un bonus y la oportunidad de seguir avanzando en su progresión de mejorar en la competición. A disfrutar del fin de semana.
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Fue un día muy especial para él y con un resultado muy merecido después de toda la dedicación que ha puesto en los últimos meses. Olazábal simplemente ama el golf y tiene unas ganas de mejorar difícil de poner en palabras. A eso hay que añadirle una capacidad de dedicación sobrehumana ya interiorizada en su ADN. Hay que verlo y vivirlo para creerlo.
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El resto de la progresión que ha conseguido en estos meses tiene que ver una adaptación espléndida a entrenamientos diferentes para él, a los que no estaba acostumbrado, donde obtienes ayuda de la nueva tecnología para afinar las sensaciones y preparar la mente para competir.
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Todo esto es un proceso y el resultado es un empujón para ver que estás en el camino. Lo más importante al final es tener claro dónde quieres llegar y el esfuerzo y la dedicación que requiere darse la opción de conseguirlo.
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