Inicio PGA Championship PGA Championship 2023 La bala Nº 130 viene de fábrica con la punta de diamante
Todas las miradas del golf español puestas en Jon Rahm y en ese vacío en la vitrina

La bala Nº 130 viene de fábrica con la punta de diamante

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Marcador del tee de salida del hoyo 8 de Oak Hill en el PGA Championship 2023
Marcador del tee de salida del hoyo 8 de Oak Hill en el PGA Championship 2023

Hace casi 64 años, un 30 de julio de 1959, arrancaba la primera participación de un jugador español en la historia del PGA Championship. Era Manuel de la Torre, nacido en Madrid en 1921, que firmaría un 76 en aquella primera ronda pionera en el Minneapolis Golf Club y fallaría el corte. Hasta once ediciones jugaría De la Torre entre 1959 y 1971, antes de la irrupción de Severiano Ballesteros en la edición de 1981, el segundo español en disputar este major de una lista muy cortita que de momento se ha quedado en 16 jugadores. No hay error en la cifra: sólo 16 españoles han disputado al menos una edición del PGA, y todavía habrá quien no entienda cómo es posible que el golf español no tenga este título. Eso sí, desde que Seve entró en escena en 1981, al menos un jugador español ha estado siempre presente en todas y cada una de las ediciones del PGA.

En total, exactamente hasta hoy, estos 16 jugadores españoles (entre los que ya se contaban nuestros cuatro representantes de la presente edición, Rahm, Larrazábal, Otaegui y Arnaus) suman 128 comparecencias y, por tanto, 128 intentos de victoria. Este año, a partir de este jueves, por riguroso orden de aparición, Otaegui cargará la bala nº 129, Jon la 130, Arnaus la 131 y Larrazábal la 132. 

No hace falta señalar que la bala Nº 130, la de Jon en esta edición de 2023, viene de fábrica con una punta de oro. Lo que sea que tenga que ser con tal de distinguirla de todas las demás. Porque el vasco ya está acostumbrado a salir como favorito en los Grandes, pero en esta ocasión viene con el plus de haber ganado el Masters, que además era su segundo triunfo en un major, el de su definitiva confirmación en la élite de la élite. 

Esta es la lista de los 16 españoles que han jugado al menos una edición del PGA y el número de comparecencias, sin contar con la de este año, por orden cronológico de aparición:

1. Manuel de la Torre (11)

2. Severiano Ballesteros (13)

3. Manuel Piñero (1)

4. José María Cañizares (1)

5. José María Olazábal (21)

6. Miguel Ángel Jiménez (15)

7. Nacho Garrido (3)

8. Sergio García (24)

9. Gonzalo Fernández Castaño (6)

10. Pablo Larrazábal (8)

11. Álvaro Quirós (4)

12. Rafa Cabrera Bello (9)

13. Jon Rahm (6)

14. Adrián Otaegui (2)

15. Jorge Campillo (3)

16. Adri Arnaus (1)

De acuerdo: Jon es uno de los máximos favoritos y hasta parece legítimo que los aficionados españoles sueñen con la posibilidad de cerrar el particular Grand Slam español, pues sólo falta el PGA en el palmarés patrio, pero de vez en cuando conviene sacar a pasear algunos datos y cifras, para darse cuenta del auténtico milagro que fueron y son los Ballesteros, Olazábal, García o Rahm. 

Decíamos que sólo 16 españoles han disputado al menos un PGA, desde que Manuel de la Torre nos estrenara en aquel lejano 1959. Pues bien, sólo en la edición de 2023 nos encontramos con la friolera de 88 jugadores estadounidenses, bastante más de la mitad del total de participantes. Pero es que aún hay más. De esos 88 jugadores, al menos un tercio de los nombres nos cuadrarían como ganadores el próximo domingo. Entre los de las barras y estrellas, por ejemplo, tenemos a un buen puñado de rabiosos favoritos a la victoria: Scheffler, Thomas, Schauffele, Cantlay, Dustin Johnson, Koepka, Morikawa o Finau. También tenemos un buen grupo de serios candidatos: Reed, Young, Burns, Homa, Fowler, Woodland, Spieth (si finalmente sale a jugar). Y por último encontramos un numeroso grupo de nombres que, sin ser favoritos, tampoco sería tan extraño o sorprendente verlos triunfando: Bradley, Steele, Mitchell, Henley, Kitayama, Hoge, Gooch, Moore, DeChambeau, English, Horschel, Kisner o Theegala, entre otros, pues en este punto el análisis es mucho más subjetivo. Es cierto, este año tenemos una bala con la punta de diamante. Pero es que el arsenal local puede (y hasta debería…) llevárselo todo siempre por delante. 

NOTA FINAL: Manuel de la Torre, madrileño, aunque nacionalizado estadounidense, fue el primer español en jugar el PGA. Pero es que su padre, el mítico Ángel de la Torre, fue el primero en jugar el Open (1920) y el US Open (1925). Seguro que ninguno de los dos, en su momento, tuvieron la conciencia de estar haciendo historia. Pero el caso es que la hicieron. Y el golf español, de alguna manera, debiera reconocérselo más. No sabemos cómo, de qué manera, pero no estaría mal buscarla.