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El driver de Rahm, el tee time de Larrazábal, el plan de Jason Day, Jordan Spieth...

Últimas pinceladas desde Oak Hill antes de que comience la acción

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Jordan Spieth jugará casi con total seguridad mañana en el PGA Championship. © Golffile | Mateo Villalba
Jordan Spieth jugará casi con total seguridad mañana en el PGA Championship. © Golffile | Mateo Villalba

Miércoles de previa muy frío en Rochester, aunque pasado el mediodía se templaba un poco el ambiente. Tiene fama esta esquina de los Estados Unidos de un tiempo impredecible, sobre todo en el mes de mayo. Sin embargo, las cosas como son, los partes lo han clavado esta semana, pues ya se venían avisando de un severo descenso de la temperatura justo para el miércoles, que tendrá continuidad el jueves, primer día de competición.

La cuestión está en saber si la PGA de América se va a compadecer de los jugadores, sobre todo los del turno matutino de mañana, jueves, que van a jugar muchas horas con temperaturas muy bajas. Y nos centramos básicamente en los tees de los hoyos 3 y 11, dos pares 3 de armas tomar, muy largos y muy complicados. Veremos si adelantan algún tee, lo cual está previsto hacer en alguna jornada, por cierto.

En el 3, por ejemplo, se ha visto esta semana a un señor que responde al nombre de Dustin Johnson pegar la madera 7 desde atrás… Y hoy, en el 11, a eso de las once y cuarto de la mañana, todavía con una temperatura bastante baja, Jon Rahm se plantaba en el tee y decía en voz alta, “el driver, ¿no?”, para regocijo de los numerosos aficionados que se apretujaban alrededor. Después, claro, sólo pegaba un hierro largo, aunque se quedaba corto…

Dustin Johnson hoy miércoles en Oak Hill. © Golffile | Eoin Clarke
Dustin Johnson hoy miércoles en Oak Hill. © Golffile | Eoin Clarke

Mañana jueves no se espera mucho viento. Pero el viernes y el sábado sí va a soplar lo suyo, con rachas que pueden rozar los 40 kilómetros por hora y dirección del suroeste, lo que dificulta todavía más las cosas en los hoyos 6 y 9, que ya son complicadísimos (y muy largos) en calma chicha. Incluso, pone también algo cuesta arriba las cosas en el 8, un hoyo en teoría más sencillo. Para compensar algo, esta dirección del viento hace algo más cortos los hoyos 17 y 18, otros dos monstruitos.

Pasan las jornadas previas a la competición y el lema que se repite en Oak Hill no cambia, tal y como se esperaba: el que gane aquí realmente será el jugador más completo de la semana, porque el test de golf es más que serio. De todas maneras, los escapistas lo van a tener más crudo: si empiezas a no coger greenes puedes salvarte aquí o allá, ir poniendo parches con el juego corto, pero a la larga será imposible que te mantengas en el pelotón de cabeza.

No sabe nada Pablo Larrazábal. Hoy ha salido a jugar sus preceptivos nueve hoyos de práctica a las once de la mañana. 11:AM. Exacto: el nombre de su marca de ropa de golf que en breve estará ya en el mercado a través fundamentalmente de la venta online. El barcelonés salía por el hoyo 1 y curiosamente, por el otro lado del campo, a la misma hora, lo hacía Jon Rahm por el 10 en un partido muy ‘de equipo’, puesto que iba acompañado del capitán europeo de la Ryder, Luke Donald, y de Victor Perez, un serio aspirante a meterse en el equipo.

Recordemos que hay cuatro jugadores que esta semana podrían sumar su tercera victoria en el PGA Championship, palabras mayores, pues sólo se quedarían por detrás de Walter Hagen (5), Jack Nicklaus (5) y Tiger Woods (4). Son Rory McIlroy, Brooks Koepka, Justin Thomas y Phil Mickelson. A los tres primeros, la verdad, les cuadra el cartel de favoritos. Y con Phil nunca se sabe, tal y como se demostró hace unas semanas en el Masters, si bien el Augusta National, para el de San Diego, es casi un segundo hogar. Veremos cómo se desenvuelve en el rough de Oak Hill.

Pablo Larrazábal en la jornada de prácticas del miércoles en Oak Hill Country Club. © Golffile | Eoin Clarke
Pablo Larrazábal en la jornada de prácticas del miércoles en Oak Hill Country Club. © Golffile | Eoin Clarke

Además, hay un jugador que podría cerrar con un triunfo en Oak Hill su particular Grand Slam, Jordan Spieth. Conseguiría tal logro antes de cumplir los 30 años, lo que no está nada mal. La participación del texano en la competición ha estado en el alero toda la semana por culpa de una lesión en la muñeca izquierda, pero en el momento de editar esta información todo apunta a que será de la partida.

A Jon se le sigue viendo maravillosamente tranquilo. Sabe que esta misma semana podría escribir una página inigualable en la historia del golf español, pero urgencia, lo que si dice urgencia, no tiene ninguna. Como debe ser. Si gana, sería el primer español que se lleva dos Grandes en un mismo año y además cerraría el Grand Slam de España en los majors. Después de ganar en 2021 el US Open no lo hizo nada mal en el siguiente Grande, que en aquel caso fue el Open, donde terminaba en tercera posición.

Un ultimo apunte. Jason Day es uno de los grandes favoritos, atendiendo a los momentos de forma y las dinámicas positivas. Sin embargo, el australiano saldrá a competir mañana sin haber jugado ni un solo hoyo de prácticas en los días previos. Ha explicado que se conoce bien y que lo que necesitaba por encima de todas las cosas era descanso. Veremos qué tal le va.

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