Sensacional sábado de golf en el Old Course de St Andrews. Digno de la 150 edición del Open. Preciosa batalla en los últimos partidos con un tiempo sensacional, el viento apretando en los últimos hoyos y el campo poniéndose duro en ese atosigante tramo que va del 13 al 17.
Ahí, precisamente ahí, han perdido pie Dustin Johnson, Cameron Smith, Scottie Scheffler, Patrick Cantlay o Cameron Young. No todos están descartados para la victoria, pero este domingo de Open apunta a un ‘remake’ del duelo al sol de Nicklaus y Watson con Rory McIlroy (-16) y Viktor Hovland (-16) como protagonistas.
McIlroy y Hovland han librado un precioso mano a mano en el penúltimo partido del día. Han entregado sendas tarjetas de 66 golpes y han agarrado un colchón que podría ser casi definitivo. Los últimos 18 hoyos de un Grande puede ser muy largos, pero cuatro golpes de ventaja en poder de estos jugones parece mucho botín. Raro sería que fallaran los dos.
Los líderes tienen cuatro golpes de ventaja sobre Cameron Young (-12) y Cameron Smith (-12), cinco sobre Si Woo Kim (-11) y Scottie Scheffler (-11) y seis sobre Dustin Johnson (-10). La lógica indica que entre estos jugadores debería estar el posible candidato a dar la sorpresa a McIlroy o Hovland. No es fácil, pero el Old Course sigue generando buenas vueltas. Así se ha visto hoy con 22 tarjetas por debajo de 70 golpes.
McIlroy ha conseguido fulminar hoy un gafe que le venía persiguiendo en este 2022. Al final ha roto con maleficio de los sábados. La pifió en el PGA Championship con una tarjeta de 74 golpes y tropezó también en el US Open con 73. En ambas ocasiones se quedó sin opciones de victoria. Hoy, sin embargo, ha dado un golpe sobre la mesa. Sus 66 golpes de hoy se llevan el honor de ser su segundo mejor sábado de siempre en los Grandes, sólo superado por el 65 que hizo en el Open en 2018.
Hovland, por su parte, le ha aguantado el pulso de maravilla. El noruego saldrá este domingo por primera vez en el partido estelar de un ‘Major’. Veremos cómo responde. No se ha visto ahí antes, aunque ya ha demostrado madurez más que suficiente en las grandes citas. En cualquier caso, su mejor puesto en los Grandes hasta la fecha son dos duodécimos en el US Open (su año de amateur batiendo un récord de Jack Nicklaus) y en el Open Championship del año pasado. Tampoco fue capaz de rendir a su mejor nivel en su primera Ryder. Hoy sábado sí que ha aguantado el pulso y de qué manera, con una vuelta impoluta libre de bogeys, salvando algunos pares sensacionales como el del hoyo 17. Pero mañana es domingo, esto es el Open y esto es St Andrews. Habrá que ver si estamos ante su consagración.
McIlroy se ha mostrado muy poderoso de tee a green y ha tenido momentos de extraordinaria brillantez, como el eagle en el hoyo 10 embocando desde la arena. Las gradas se vinieron abajo y hasta Scottie Scheffler, que atendía a la escena desde el tee del 11, aplaudió. Espectáculo total en el Old Course. Curiosamente, la última vez que Rory hizo eagle un sábado de Grande fue en 2014, en Royal Liverpool… El domingo ganó el torneo.
McIlroy y Hovland apuntan a un mano a mano este domingo. Un duelo europeo. No gana un golfista del viejo continente en St Andrews desde Nick Faldo en 1990. Ya va siendo hora de acabar con esta dura sequía. Hovland busca el primero y McIlroy el quinto, su segundo Open. Sería su primer Grande en ocho años. También hay que lidiar con esa presión. Ninguno, por cierto, querrá salir del Old Course con la etiqueta de ser el primer jugador de la historia que termina un sábado de ‘Major’ con -16 y no gana el torneo… Alguno tendrá que ser… o los dos.
Le habéis quitado a John Daly el Open de 1995!