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Koepka las tuvo tiesas (también) con un árbitro con Sergio como testigo directo

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Brooks Koepka, en plena discusión con los árbitros.

Ocurrió en el hoyo 15 del partido de foursome del sábado por la mañana que enfrentó a Sergio García y Jon Rahm contra Daniel Berger y Brooks Koepka. Berger falló su golpe de salida a la derecha y su bola acabó dentro de unas matas. Posición muy fea. Le tocaba pegar a Koepka…

Cuando el ganador de cuatro Grandes se puso a la bola interpretó que una zona de drenaje se interponía en su movimiento para hacer el swing y consultó con un árbitro para conseguir un alivio sin penalidad. El árbitro, David Price, analizó la situación y le dijo a Koepka que no veía la necesidad de conceder el dropaje, ya que a su juicio la zona de drenaje no le molestaba en absoluto.

Koepka no se quedó contento con la decisión y discutió de manera desafiante. «¿Tú me has visto alguna vez pegar a la bola?», tratando de poner contra las cuerdas al árbitro. Éste, sin embargo, no se achantó y le replicó: «Te he visto pegar muchísimas bolas». En ese momento de la discusión, Sergio García, que estaba presente en la escena dando más bien la razón a la pareja norteamericana, se echó a reír por la reacción del árbitro y, al menos, provocó una cierta distensión.

Koepka pidió una segunda opinión y acudió al lugar Mark Litton. El segundo árbitro apoyó la decisión del primero y denegó el alivio a Koepka. El golfista de Florida, en ese instante, una vez se había terminado ya la conversación, señaló a los dos árbitros y les dijo: «si me rompo la muñeca será culpa vuestra».

Finalmente, Koepka pegó el golpe, no se hizo ningún daño en la muñeca y la realidad es que ejecutó una gran tiro con el que consiguió llevar la bola a green, aunque el hoyo lo acabarían empatando y el partido lo acabaron ganando los españoles por 3 y 1. Fue el momento más polémico de lo que llevamos de Ryder Cup, aunque no el único.

Por la tarde, hubo un ligero enganche que no pasó a mayores entre Jordan Spieth y Adam Hayes, el caddie de Jon Rahm. El golfista de Barrika se marchó al agua de salida en el hoyo 5. Los cuatro jugadores se pusieron de acuerdo en cuál había sido el punto de entrada de la bola al área de penalidad para realizar el dropaje, sin embargo en el último instante uno de los voluntarios que marcan la caída de las bolas le dijo a Jon que, a su juicio, la bola había entrado varios metros más hacia adelante, una posición que le habría permitido a Jon incluso buscar el green con el tercer golpe.

Spieth se metió por medio del comentario del voluntario y señaló que el dropaje tenía que ser donde habían decidido ellos, instante en el que Adam Hayes se interpuso para defender la posible nueva posición de Jon y estuvieron durante un minuto discutiendo. Jim Bones, antiguo caddie de Mickelson, aseguró en la retransmisión de televisión que «Adam se había mostrado muy enérgico».

Como decimos, el asunto no fue a más, Jon dropó donde había convenido inicialmente los jugadores y Spieth, Hayes y el propio Rahm se dieron la mano poco después para zanjar el asunto.

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