Es una pura anécdota, pero curiosa. Más de uno y de dos lo elevaría a materia de estudio en primero de conspiración. Nosotros no iremos tan lejos. Rory McIlroy (-1) ha fallado el corte en el FedEx St Jude Championship. El asunto en sí es noticia. Hay que remontarse al Valero Texas de este año, justo antes del Masters, para encontrar el otro corte perdido por Rory en todo 2022. Aquella semana, la del Valero, JJ Spaun ganó el torneo, su única victoria en el PGA Tour. Por si todavía no se han percatado, Spaun (-11) es hoy líder en solitario del primer Playoff de la FedEX Cup tras entregar hoy una tarjeta de 67 golpes sustentada principalmente en una brillante capacidad para recuperar.
McIlroy no es la única ilustre víctima que se ha llevado por delante el TPC Southwind de Memphis. Hoy sí ha hecho honor a su nombre, ha saltado el viento y ha complicado mucho más las cosas a los jugadores. Ayer 17 golfistas hicieron 65 golpes o menos. Hoy la cifra se ha parado en seis. Nada que ver. El campo estaba un poco menos receptivo, pero sobre todo ha soplado un viento incómodo y cambiante, sobre todo a medida que avanzaban las horas.
El otro caído en combate con galones de general es Scottie Scheffler (-1). El Número Uno del mundo ha sucumbido a los greenes del recorrido de Tennesse. Hoy ha estado un poco mejor con el putter que el jueves, cosa que no era difícil, pero sus 68 golpes no han sido suficiente para estar el fin de semana. El torneo ha perdido al Número Uno y al Número 3 del mundo. Volverán, eso sí, en el segundo Playoffs. Los que ya no volverán con seguridad son otros 30 jugadores que han fallado el corte y no podrán optar a estar entre los 70 mejores. Entre ellos están Justin Rose y Webb Simpson.
Spaun es el líder de una clasificación dominada por actores que, a priori, estaban llamados a ser secundarios esta semana. Así, a un golpe de Spaun están Sepp Straka (-10), que llegó a este primer Playoff tras fallar seis cortes seguidos, y Troy Merritt (-10), que arrancó la semana más allá del puesto 100 de la FedEx Cup. A dos se encuentra Denny McCarthy (-9), un joven jugador que aún persigue su primera victoria en el PGA Tour.
A partir de aquí, sí aparecen nombres que están llamados, al menos alguno de ellos, a tener opciones de victoria el domingo. Hablamos de Tony Finau (-8), que ha hecho 68 golpes y ya suma once rondas consecutivas firmando ese resultado o mejor, Cameron Smith (-8), al que definitivamente parece importarle bien poco todo el ruido que se genera a su alrededor con su más que segura marcha a LIV Golf, Adam Scott (-7) o Sahith Theegala (-7). Más lejos tenemos a Will Zalatoris (-6), que hoy ha firmado la mejor vuelta del día (63 golpes), empatado con Tyler Duncan, y Justin Thomas (-6), a quien conviene no perderle nunca la pista.
Jon Rahm (-3), por su parte, se encuentra a ocho golpes de la cabeza, lejos, pero aún todavía con opciones de meterse en la pelea el domingo. Necesita, obviamente, 36 hoyos de fábula. Al igual que Rahm, Patrick Cantlay (-5) y Collin Morikawa (-4) se han dejado hoy terreno, pero no se puede decir que haya dicho la última palabra.
Por último, apuntar el corte luchado con sangre, sudor y lágrimas de Cameron Young (-2), uno de los grandes protagonistas de la semana por si definitivamente se va o no a LIV Golf. Cuando ha terminado de jugar, asegurado el corte, ha estrechado la mano de Justin Thomas y se ha relajado. Seguramente haya sido el único momento de relax en los últimos cuatro días.
