Inicio PGA Championship PGA Championship 2020 Una cena con Justin Thomas y la oferta de Stephen Curry
Dos historias curiosas para conocer mejor al flamante campeón del PGA Championship

Una cena con Justin Thomas y la oferta de Stephen Curry

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Collin Morikawa, a su llegada al green del hoyo 18. (© Golffile | Ken Murray)

Collin Morikawa tiene un mantra que repite cada vez que se mira al espejo. «Yo no me creo expectativas, eso es algo de los medios de comunicación, lo que yo me pongo son objetivos que quiero cumplir». Esta frase resume de una manera bastante ajustada la personalidad del joven campeón del PGA Championship. Quiere hacer su propio camino y escucha a la gente justa. No se despista con el ruido de fuera. Él mira, analiza, disecciona y se queda con lo que le puede servir y lo que no lo deshecha. Puede parecer simple, pero es realmente complicado. Hay que tener las ideas claras, una formación amplia y una personalidad muy definida.

Cuesta despedirse de este PGA extraño, desnudo, redondo y revelador

Morikawa siempre ha creído profundamente en sus posibilidades y lo terminó de corroborar en una cena privada con Justin Thomas. La concertó su agente al poco tiempo de aterrizar en el PGA Tour. Fue algo así como ahí lo tienes, pregúntale lo que quieras. De todo lo que habló con Thomas se le quedó grabada una frase: «si eres suficientemente bueno, no te preocupes, porque antes o después vas a llegar y te saldrán las cosas». Morikawa jamás ha dudado de que es tan bueno como los mejores del mundo y aquella frase de Thomas le sirvió para convencerse todavía más. Le dio tranquilidad. De padre japonés y madre china, a sus 23 años, está convencido de que está predestinado para triunfar. «No tengo miedo de lo que pueda venir ahora, más atención, más presión, más comentarios… No me importa. Estoy preparado. Esto es lo que quiero ser y estoy donde quiero estar. Me encanta el golf y la competición». Tiene una mezcla entre el zen japonés y el descaro norteamericano. Su padre y su abuelo nunca llegaron a vivir en el país nipón, pero está muy orgulloso de esas raíces: «No hemos vivido nunca en Japón, pero allí me siento como en casa y me encanta la comida», asegura.

El golpe icónico del PGA fue una genialidad que no estaba en el guión

Morikawa ha demostrado que no es fácilmente impresionable, ni dentro, ni fuera del campo de golf. Dentro lo puso de manifiesto en el PGA y fuera lo dejó bien claro cuando Stephen Curry, que siguió en el TPC Harding la última ronda del torneo, le hizo las dos primeras preguntas de su comparecencia como campeón del PGA Championship. Antes de responderle a la primera le soltó a la gran estrella de los Warriors y de la NBA: «¿le importaría quitarse la gorra para hacer la pregunta?». Fue una broma, pero demuestra su descaro. Después le dijo que su caddie era un gran aficionado de los Warriors, aunque su corazón estaba en Los Ángeles.

Es imposible que Morikawa sepa de verdad lo que está haciendo…

Curry aprovechó para realizarle una proposición: «el día que te haga falta un caddie ya sabes dónde estoy, los próximos tres meses estoy libre». La respuesta de Morikawa fue: «Perfecto. Me encantará. Quiero ver cómo te desenvuelves y me gustaría verte jugar», apuntó.

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