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La victoria de Ryan Fox en el BMW PGA Championship debería estudiarse en los manuales de psicología deportiva

Cómo ganar un torneo poco después de pegar tu peor golpe de la semana

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Ryan Fox posa con el trofeo de campeón del BMW PGA Championship
Ryan Fox posa con el trofeo de campeón del BMW PGA Championship. (© Golffile | Fran Caffrey)

Ryan Fox (-18) se ha ganado esta tarde en Wentworth un capítulo entero en el mejor manual de psicología deportiva aplicada a la competición. La victoria del golfista neozelandés en el BMW PGA Championship ha sido un canto a la resiliencia, un elogio al rebote a la altura de los de Dennis Rodman o Charles Barkley. El zorro se ha impuesto a una manada de lobos poco después de pegar el peor golpe de la semana. Tal cual.

El accidente en cuestión ha ocurrido en el hoyo 3. Fox ha tirado fuera de límites por la derecha su salida desde el tee y se ha anotado un devastador triple bogey. Ha sido como un martillazo en el dedo. El peor golpe en cuatro días en el peor momento. De pronto ha bajado a -10, a cinco golpes de Aberg, cuatro de Hatton y por detrás de Rahm, Rai, Hovland, Scott, Shinkwin, Fleetwood, Syme, Straka, Detry, Tom Kim, Heligkilde o incluso Rory McIlroy, que venía protagonizando el gran ataque del día. Es decir, fuera del top 10 y superado por malas bestias.

Hay dos maneras de reaccionar a este mazazo. La primera es el desencanto, rabiar por tu mala fortuna y pensar que el triunfo ya no es posible, mientras rumias durante cuatro horas cómo has podido ser tan inoportuno de pegar un golpe tan malo. La otra es como lo ha hecho Ryan Fox, es decir, pasando página y jugado un golf de ensueño. Del peor golpe de la semana, al mejor golf que se ha visto hoy en Wentworth. Que un golpe, un solo golpe, no determine tu futuro.

El juego de Fox desde el hoyo 4 al 18 ha sido una barbaridad. Si buscan rebotar en internet, les sale ya a esta hora una foto del oceánico. Después de mandar su bola fuera de límites ha cazado ocho de las nueve siguientes calles, incluida la segunda bola del 3. La que ha fallado ha sido al primer corte de rough, semicalle. Además, ha hecho ocho birdies entre el 6 y el 18 y el putt más largo que ha metido ha sido de tres metros. Una exhibición.

Fox venía remontando por debajo del radar. Se había quedado tan lejos que la atención estaba en la batalla entre Aberg, Rahm, Hatton, Fleetwood y hasta Hovland, con el permiso de McIlroy, que buscaba pone un resultado imponente en la casa club, aunque finalmente se quedó un poco corto (-13). Fox no existía en ese momento…

Aparece en los monitores en el hoyo 12, después de lograr tres birdies consecutivos y colocarse con -15, a la estela de Hatton. Ojo con Fox que viene al galope. Sin embargo, se le pone cara de campeón en el 15. Qué cosas. Pegó su segundo peor golpe del día, otra vez desde el tee, aunque ahora fallando por la izquierda. Se metió entre los árboles, aunque tuvo la suerte de que la bola se quedó bien. Aún así, tenía un golpe delicadísimo a green. Pegó un tiro sublime, la dejó a dos metros y medio y metió el putt de birdie. Risa floja. El zorro.

La genialidad de Fox en el 15 llegó poco después del parón de casi hora y media por tormenta eléctrica y minutos más tarde del bogey de Hatton en ese mismo hoyo 15. El hijo del mito de los All Blacks tomaba ahí el mando de las operaciones y ya no lo soltaría. Remató su obra de arte con un birdie más en el 18, con toda la presión en su espalda, un birdie obligado para evitar el desempate con Hatton, que murió matando con otro birdie en el 18 o Rai, que hasta pateó para eagle en el último hoyo para igualar con Fox y no lo metió de milagro. El tercer tiro del campeón en el 18 fue otra obra de arte. Necesitaba el birdie, la dejó a dos metros y metió el putt. Sólo le faltó la haka en el green para celebrarlo. Lo merecía.

Fox ha acabado ganando con un golpe sobre Hatton y Rai y dos sobre Jon Rahm, que cuaja otra brillante actuación en Wentworth. Es el cuarto triunfo del neozelandés en el DP World Tour y el más importante de largo. Se coloca tercero en la Race to Dubai y rondará el puesto 30º en el ranking mundial. Se acaba de asegurar su segunda presencia consecutiva en el Masters de Augusta, pues acabará el año entre los 50 primeros.

Resultados finales del BMW PGA Championship 2023