– Como ya se ha repetido esta semana, Rafael Cabrera Bello ha sido el decimocuarto jugador español que ha debutado en un Masters. Pues bien, el 17º puesto cosechado por el canario en su estreno en Augusta lo convierte en el mejor debutante español de la historia.
Hay que pensar que, incluyendo a Rafa, sólo seis de esos catorce españoles consiguieron pasar el corte en su estreno en el Masters. Los otros cinco fueron Ángel Miguel (1959), que acabó 25º, Ramón Sota (1964), que acabó 34º, Severiano Ballesteros (1977), que finalizó 33º, Sergio García (1999), que terminó 38º, y Gonzalo Fernández Castaño (2012), que acabó 61º.
Si nos fijamos en el registro final, el +4 de Rafa es el segundo mejor registro de todos ellos, sólo por detrás del +3 de Severiano en su debut, aunque hay que puntualizar que las condiciones han sido probablemente mucho más duras en esta edición si nos atenemos a los registros generales: el ganador en 1977, Tom Watson, firmó un resultado final de -12, por el -5 de Willett, y en aquella ocasión hasta 23 jugadores terminaron por debajo del par, por los seis que lo han hecho en el ventoso 2016.
Hay que recordar asimismo que tanto José María Olazábal como Sergio García debutaron como amateurs, igual que Alex Larrazábal. Sebastián Miguel (1961), Antonio Garrido (1978), Manuel Piñero (1978), José María Olazábal (1985), Miguel Ángel Jiménez (1995), Nacho Garrido (1998), Alex Larrazábal (2003) y Álvaro Quirós (2009) fueron los ocho españoles que no pasaron el corte en su debut.
– En los días previos al comienzo del Masters hubo diferentes teorías acerca de cuál sería el resultado ganador el domingo, en vista del estado de los greenes (el martes ya estaban muy rápidos) y, sobre todo, de las previsiones meteorológicas que se avecinaban, anunciando tanto viento. Johnny Miller, por ejemplo, se aventuraba a señalar que el ganador podría estar en torno al resultado de PAR. El Número 1 del mundo, Jason Day, mucho más optimista, se iba hasta el -10. Y hubo uno que acertó de pleno. Fue Sergio García, quien dijo literalmente que el ganador podría estar en «-5 ó -6». Bingo.
– El golf sueco sigue sin ganar su primer grande. Aunque en esta ocasión siempre tendrá el consuelo de saber que Willett lleva muy a gala su sangre materna sueca… «A veces, cuando era amateur y no entraba en el equipo inglés sí tuve el pensamiento de representar a Suecia, sí», reconocía ayer riendo el flamante ganador del Masters. «Ojalá pudiera representar a ambas naciones», puntualizaba algo más serio. Willett lleva en su bolsa, de hecho, una bandera sueca. Menos da una piedra.
– Aunque parezca increíble no ha sido hasta 2016 cuando el golf inglés ha igualado con el español en el número de ganadores del Masters (dos, Faldo y Willett) y en la suma de victorias (4). Ahora se trata de que rompamos pronto el empate…
